Juncadella se deja notar en Nürburgring con las dos Poles y dos 'top 5'

El español, a los mandos de un Mercedes del equipo HRT marcó las poles el sábado y el domingo para las dos carreras de 4 horas de este fin de semana, por delante de los grande especialistas germanos del ‘infierno verde’.

Está clara la razón por la cual Mercedes ha querido conservarlo como piloto de la estrelle, pese a que disputará en WEC y las carreras largas de IMSA con un Corvette oficial.

Curiosidad, el Mercedes de Dani llevaba diferentes colores y patrocinadores sábado y domingo.

En carrera, Juncadella se mostró igualmente rápido, pero su compañero Frank Bird no lo fue tanto, especialmente en la primera carrera. Pese a ello, la pareja acabó quinto en la primera carrera y cuarto en la segunda. En esta primera carrera, Bird se dejó sorprender por varios rivales y después sufrió un pinchazo lento.

La primera carrera fue para el Porsche-Falken de Nico Menzel y Joel Eriksson. Entraron en la meta por delante de sus compañeros del Porsche-Mathey de Vanthoor-Laurens, que entraron en meta a sólo 3”6 de los ganadores. 

Pudo haber sido un doblete de del equipo Falken, pero Alessio Picarello y Martin Ragginger, que se habían rezagado por una penalizaron al adelantarse en la arrancada; remontaron y se enzarzaron en una batalla final por el tercer puesto con el Audi de Steppler-Winkelhock; ambos coches se tocaron varias veces y Picarello abandonó en la última vuelta con un pinchazo.

La segunda carrera vio como el Porsche-Mathey de Vanthoor-Laures se hizo con una inesperada victoria cuando Vanthoor superó al Lamborghini de Pepper-Estre prácticamente en la última curva. Estos habían tomado el mando en el último repostaje cuando los favoritos ya lo habían hecho y ellos pudieron aprovechar un periodo de ‘código 60’. Pero para colocarse en cabeza iban justos de combustible y ralentizaron al final para cruzar la meta justo cumplidas las 4 horas de carrera. Calcularon tan justo… que el Porsche, que venía lanzado les superó sobre la misma línea por 42 milésimas. Victoria merecida del Porsche que había estado dominado toda la carrera.

Picarello, que había hecho la misma estrategia que el Lamborghini, se retiró en la última vuelta por un pinchazo.