Ferrari muestra interés en la normativa IMSA-ACO de los LMDh

Hace unas semanas, la IMSA y el ACO anunciaron un acuerdo que entrará en vigor en 2021-2022 y que permitirá a un coche competir en carreras del campeonato estadounidense IMSA, pero también en el Mundial de Resistencia de la FIA, el WEC. Esta convergencia de normativas implica la creación de los LMDh, lo que Ferrari considera una "buena oportunidad". 

Coletta ha explicado que ésta normativa conjunta les permitiría reducir costes, algo que consideran "perfecto", por lo que podrían desarrollar su primer prototipo desde el Ferrari 333SP, que debutó en la IMSA en 1994. Sin embargo, tener un chasis propio es una condición indispensable para sumarse a la nueva categoría.

"Esperamos tener un chasis Ferrari, es una necesidad. Es importante tener una línea directa con nuestros coches de carretera; por definición, hacemos un Ferrari", ha expresado en declaraciones recogidas por la revista británica Autosport.

El equipo insiste en que desarrollar un coche utilizando el tren de rodaje de uno de los constructores que actualmente compiten en LMP2 no sería un inconveniente, aunque piden usar su propio chasis y su propio motor. Además, con el presupuesto del que disponen actualmente, Coletta opina que el equipo estaría en condiciones de luchar en esta nueva categoría.

"Si coges todas las partes de DPi –actual prototipo de IMSA–, los mismos frenos, el mismo híbrido, la misma suspensión... Los costes serán menores. Con nuestro presupuesto creo que es posible luchar en la nueva categoría", ha añadido.

El próximo mes de marzo se conocerán los primeros detalles sobre la normativa en Sebring. Por tanto los de Maranello prefieren ser cautos y esperar a tener el reglamento definitivo para tomar una decisión al respecto.

"Hemos hablado con todos los socios de IMSA y de ACO y las discusiones están abiertas. En este momento prefiero no hablar mucho sobre esto; esperamos a Sebring, donde esperamos tener las normas definitivas", ha apuntado para terminar.