Es lo que hizo un joven piloto canadiense al constatar la importancia de algo que mueve el mundo desde épocas muy remotas, más si cabe, cuando hablamos de un deporte elitista, en el que muy pocos tienen cabida, dado el reducido número de plazas disponibles.
Brendon Hartley recibió una inesperada llamada del equipo Toro Rosso para que debutase en F1 en las últimas carreras de 2017. Evidentemente, el neozelandés la aceptó, pero no por ello dejó el programa de Porsche en LMP1.
Brendon Hartley ha tenido una agenda apretada desde que Red Bull anunció que acabaría la temporada con Toro Rosso, pues ha tenido que combinar su papel de titular en Fórmula 1 con el de correr con Porsche en el Mundial de Resistencia.
Brendon Hartley está convencido de que su victoria en Le Mans 2017 fue crucial y determinante para recibir la oportunidad de debutar en la Fórmula 1 con el equipo Toro Rosso, donde ya ha sido confirmado para la temporada 2018.
Durante la jornada de ayer se anunció la renovación tanto de Pierre Gasly como de Brendon Hartley con el equipo Toro Rosso para 2018. Ello no supondrá una despedida del neozelandés de Porsche –marca con la que ha logrado sus mayores éxitos deportivos en el Mundial de Resistencia–, ya que permanecerá dentro de la formación alemana.
Porsche ha cantado el alirón antes de la última carrera de la temporada del Mundial de Resistencia de 2017. La marca alemana ha finiquitado los títulos de pilotos y de marcas en unas 6 horas de Shanghái en las que no han tenido opción a la victoria. Toyota se ha puesto las pilas y ha intentado forzar que la pelea de marcas llegase a Baréin, pero no ha podido ser.
Este fin de semana se materializó en el circuito de La Sarthe la tercera victoria consecutiva de Porsche en las 24 horas de Le Mans. Si la de 2016 ya fue bastante sorprendente por el abandono del Toyota que lideraba a falta de 3 minutos para acabar la prueba, la edición de 2017 tampoco nos dejó faltos de drama y sorpresas.
Mark Webber, junto a sus compañeros Brendon Hartley y Timo Bernhard, se ha proclamado vencedor de la quinta prueba del Mundial de Resistencia disputada en el Circuito de las Américas. A 30 minutos del final parecía que sería el Porsche 18º, pilotado por Dumas en ese momento, quien se adjudicaría la victoria, pero unos problemas mecánicos le obligaron a retirarse dejando en bandeja el triunfo para el monoplaza 17º del australiano.
