Alonso pierde la victoria de Shanghái en boxes, gana Toyota 7

Los meteorólogos habían alertado del riesgo de que lloviese durante la carrera y el tiempo les ha dado la razón. El domingo amaneció con un diluvio de tal magnitud que Dirección de Carrera se vio obligada a ondear la bandera roja en dos ocasiones y a desplegar el coche de seguridad en otras siete, bien por incidentes en pista o por el agua acumulada en el asfalto.

La carrera empezó puntual a las 11:00 hora local, las 04:00 hora peninsular española, pero Dirección de Carrera optó porque lo hiciera detrás del Safety-Car fruto de las adversas condiciones meteorológicas.

Fernando Alonso vio la salida desde la distancia, porque Sébastien Buemi fue el encargado de hacer el primer stint con el Toyota TS050 8. José María López estaba al volante de la unidad número 7, que partía desde la Pole Position.

Después de 18 minutos, los comisarios ondearon la bandera roja al constatar que las condiciones no mejoraban. De hecho, el asfalto estaba tan delicado que Thomas Laurent perdió el control del Rebellion 3 –que salía quinto– y se estrelló contra el muro. Perdió dos vueltas en boxes.

La interrupción duró 52 minutos. El pelotón se puso en movimiento de nuevo sobre la marca de la 1 hora y 10 minutos. Lo hizo detrás del coche de seguridad, que se retiró tras cinco minutos.

Con la primera bandera verde llegó la primera sorpresa: un cambio de líder en LMP1. José María López sufrió aquaplaning en la frenada de la horquilla y se fue largo a la escapatoria de asfalto, circunstancia que Sébastien Buemi aprovechó para arrebatarle la primera posición.

También hubo cambios en otras categorías. El Jackie Chan 37 tomó el liderato en LMP2 al adelantar a su compañero en la resalida. Acto seguido llegó Anthony Davidson con el Dragonspeed 31, que les adelantó a los dos para ponerse en cabeza. Al mismo tiempo, en GTE-Pro, el Porsche 92 asumía la primera posición después de que el Ford 66 se saliese de pista fruto de un toque con un rival.

El Safety-Car reapareció después de tan sólo 13 minutos de acción y éste se convirtió en la segunda bandera roja sobre la marca de la 1 hora y 40 minutos, fruto de las múltiples salidas de pista y una lluvia que no remitía.

La carrera se reanudó tras media hora de interrupción, otra vez con el coche de seguridad en acto de servicio por precaución. Sin embargo, el asfalto estaba tan delicado que incluso a baja velocidad se produjo un accidente. El Porsche 86 se fue contra el muro en plena recta principal, víctima del aquaplaning.

La primera parada en boxes de los Toyota llegó durante ese periodo de neutralización, cuando se habían disputado 2 horas y 44 minutos. Entraron de forma simultánea. Buemi dejó el coche número 8 en manos de Fernando Alonso y José María López cedió su prototipo a Kamui Kobayashi, que en ese pit-stop cambió el alerón trasero y el volante.

Como el pelotón estaba agrupado fruto del coche de seguridad, los dos Toyota cayeron por detrás del Rebellion 1 de Bruno Senna, que ya había hecho su primer cambio de ruedas y en ese instante se convertía en el líder virtual.

La bandera verde apareció a las 2 horas y 53 minutos. Alonso lanzó un ataque contra Senna, pero el adelantamiento tuvo que esperar porque Andy Priaulx se salió en la primera curva con el Ford 67 y provocó un nuevo Safety-Car.

La carrera se relanzó a las 3 horas y 7 minutos. Fernando no titubeó y dejó atrás a Senna en la primera curva para así recuperar el liderato de la carrera para el Toyota 8. Instantes después, Jenson Button situó al SMP 11 en tercera posición con una maniobra sobre el Rebellion 1.

A las 3 horas y 35 minutos, Tom Dillmann aparcó el ByKolles en plena recta principal víctima de un problema técnico. Su situación provocó el sexto coche de seguridad del día.

Todo cambió para Alonso durante esa neutralización. No sólo perdió los 20 segundos de ventaja que él mismo había creado, sino que también vio escapar la primera posición fruto de una estrategia extraña del equipo Toyota.

A las 3 horas y 55 minutos, Kamui Kobayashi hizo la segunda parada. Entró antes que Alonso, a pesar de que iba segundo. El asturiano lo hizo una vuelta después, pero se encontró la salida del Pit-Lane cerrada porque justo en ese instante pasaba el pelotón detrás del coche de seguridad. En consecuencia, cayó a la tercera posición por detrás del Toyota 7 –nuevo líder– y del SMP 11, con todo el grupo de doblados de por medio.

Los comisarios ondearon la bandera verde de nuevo a las 4 horas y 2 minutos. Alonso se enfrascó entonces en una batería de adelantamientos para reengancharse al grupo de cabeza, pero ya cedía 23 segundos respecto a Kobayashi fruto de lo ocurrido en boxes.

Fernando se embarcó entonces en una ofensiva a la desesperada para intentar lo imposible. A las 4 horas y 9 minutos superó al SMP para reclamar la segunda posición y todavía tuvo ritmo para reducir la brecha con el líder hasta los 20 segundos antes de bajarse del coche a las 4 horas y 52 minutos.

Kazuki Nakajima sustituyó al asturiano en el Toyota 8 y Mike Conway tomó el relevo de Kamui Kobayashi en el 7. Los dos entraron en la última hora de la carrera sabedores de que sólo una hecatombe podía alterar el resultado.

Y el milagro ocurrió. A las 5 horas y 39 minutos, después de que los dos Toyota hiciesen su última parada, Matevos Isaakyan perdió el control del SMP 17 y se estrelló en el tercer sector. Dirección de Carrera sacó el coche de seguridad, que reagrupó al pelotón y neutralizó la ventaja del líder.

La bandera verde llegó a siete minutos del final y deparó una carrera al sprint por la victoria, con los dos Toyota separados por tan sólo un coche doblado. Nakajima lo intentó, pero Conway hizo valer su posición y cruzó la línea de meta con 1,4 segundos de margen para tomar la victoria en las 6 Horas de Shanghái.

Doblete de Toyota en Japón con sabor agridulce para el trío del dorsal número 8, que tuvo el triunfo en sus manos hasta que una estrategia extraña del equipo decantó la balanza a favor de sus compañeros. Aun así, Alonso, Buemi y Nakajima conservan el liderato en el Mundial por cinco puntos.

Las 6 Horas de Shanghái marcan un punto y aparte en el WEC, que ahora se embarcará en un letargo de cuatro meses. La próxima vez que los coches salgan a pista será en ocasión de las 1.000 Millas de Sebring.

RESULTADOS 6 HORAS SHANGHÁI 2018