Toyota Mirai 2016: Aterriza en Europa

El Toyota Mirai cuenta con un frontal en 'X', con una gran parrilla central y dos tomas de aire de considerable tamaño en los extremos del paragolpes. Las ópticas presentan unas formas muy afiladas. Mucho más arriesgado es el diseño de su zaga con unos faros traseros de peculiares formas, casi a la par de las aletas traseras que se elevan por encima del paragolpes y el difusor. Toyota no falla en su apuesta de diseños alternativos aunque no se carrozan las ruedas traseras.

Por supuesto, la mecánica con pila de hidrógeno es su gran atractivo. El Toyota Mirai consigue moverse gracias a la reacción entre el hidrógeno y el oxígeno. Este reacción genera energía eléctrica a cambio de emitir únicamente vapor de agua, por lo que no contamina el medio ambiente. La unidad eléctrica tiene una potencia de 154 caballos y un par de 355 Nm. Gracias a este sistema el Toyota Mirai puede alcanzar los 178 kilómetros por hora y acelera de 0 a 100 en 9,6 segundos.

Su autonomía es cercana a los 500 kilómetros y su repostaje se realiza en menos de cinco minutos. Sin embargo, las infraestructuras especificas para cargar la pila de hidrógeno son casi nulas en Europa y ese es el gran problema a día de hoy de la expansión del Toyota Mirai. De hecho, este aterrizaje en el viejo continente es con matices ya que sólo se vende por el momento en Alemania, Dinamarca y Reino Unido. Por su parte, España tendrá que esperar.

A su tecnología y diseño futurista se añade un interior que mantiene esta línea con un atractivo salpicadero. A esto hay que sumar la gran dosis de equipamiento y tecnología que presenta el Toyota Mirai. Entre las ayudas de conducción destaca el Sistema de Seguridad Precolisión, el control de ángulo muerto, la alerta de tráfico cruzado posterior, la alerta por cambio de carril, el control automático de luces de carretera o el control de crucero adaptativo.