Toyota GR Yaris H2, presentación en Goodwood para una nueva bestia de hidrógeno

Pero es dentro donde está el cambio, precisamente en el motor. No funciona con gasolina, con gasoil ni con biocombustibles o e-fuels: ¡recurre al hidrógeno! De ahí el logo H2 que luce el prototipo, decorado con los mismos colores que Toyota usa en el Mundial de Rallies.

No es una novedad, claro. Toyota es firme defensora de la tecnología del hidrógeno, tanto para los motores térmicos como para los eléctricos. En este último caso comercializa el Mirai, una berlina que recurre a la tecnología ‘fuel cell’ para crear electricidad partiendo de hidrógeno.

El Toyota Yaris GR H2 está muy evolucionado respecto al Toyota Yaris H2 que vimos hacer de ‘coche cero’ hace dos años en el Rally de Ypres con Juha Kankkunen al volante y Akio Toyoda como copiloto.

La conversión de un motor térmico para usar hidrógeno como combustible, no es muy complicada. Obviamente se requiere depósitos especiales, capaces de mantener el hidrógeno a elevadísima presión, sobre 700 bar, y baja temperatura para poder tener cantidad suficiente de hidrógeno que garantice una cierta autonomía.

El Yaris GR H2, prototipo todavía, ha recurrido a dos depósitos tomados del Mirai, lo que indica que usa hidrógeno gas y no líquido. La diferencia básica es que un mismo peso de hidrógeno ocupa más volumen como gas que como líquido, pero en este último caso se precisa más presión para que la temperatura del gas sea de unos -250º –sí, 250 grados negativos–, pero no requiere depósitos presurizados y permite formas de depósito más compatible con un automóvil que los cilíndricos del H2 gaseoso.

El motor requiere pocos retoques. Los conductos de combustible originales han sido sustituidos por otros adaptados a las exigencias del hidrógeno, un nuevo sistema de alimentación e inyección adaptado al hidrógeno, bujías específicas y retoques en el software. Tan sencillo que la conversión de motores actuales a motores de hidrógeno no es imposible. De hecho, muchos de los cambios son similares -para que nos hagamos una idea- a los que se efectúan en un motor térmico para que funcione con GNC o GPL.

Desde hace tres años, Toyota ha experimentado con le tecnología de motores de combustión que usan hidrogeno como combustible. Ha tenido un Yaris y ahora tiene un Corolla compitiendo en el campeonato SuperTaikyu japonés, primero con hidrógeno gaseoso y después con hidrógeno líquido.

Unos coches preparados por el equipo Rookie, que es propiedad de Akio Toyoda, hasta hace poco máximo ejecutivo de la marca y hoy presidente no ejecutivo, además de destacado accionista de la maca. El propio Akio, a quien se le conoce con el seudónimo de ‘Morizio’ en los paddocks, es uno de los pilotos del coche.

Precisamente Toyota también ha presentado en Le Mans un concept de lo que podría ser un hypercar para las 24 Horas de Le Mans usando hidrógeno. La idea de las 24 Horas es que los coches con hidrógeno comiencen a correr la prueba a partir de 2027.

Lo que importa. ¿Lo veremos en serie? Difícil a corto plazo por una razón sencilla: no hay una red de ‘hidrogeneras’.