Tesla desactiva el Autopilot de un Model S de segunda mano que contaba con él

¿Es el Autopilot de Tesla parte del equipamiento de los coches americanos o es un servicio asociado a cada usuario que compra el vehículo? Éste es el debate que se ha instaurado en Estados Unidos tras saltar a la palestra un caso de lo más rocambolesco. Sus protagonistas son Tesla, un Model S de segunda mano, el concesionario de coches de ocasión United Traders y un desdichado cliente.

El Tesla Model S en cuestión se vendió como vehículo nuevo en 2017, aunque fue una de las muchas unidades que salió con un problema de fábrica que causaba que la pantalla del sistema multimedia se viese con un tono amarillento. Su dueño devolvió el coche al fabricante. Ante esta tesitura, el modus operandi de Tesla pasaba por subastar el coche entre concesionarios de segunda mano para que fueran ellos los que lo vendiesen a un nuevo dueño. Y así fue a finales del año pasado.

El nuevo poseedor del Tesla Model S lo utilizó sin pega desde un primer momento. Sin embargo, una actualización de software de las muchas que hace la marca inutilizó su sistema Autopilot. Fruto de ello nuestro protagonista se fue a la sede de United Traders para ver qué podía haber pasado. En el concesionario no encontraban el fallo.

Tras ponerse en contacto con Tesla, la marca reconoció que, tras estudiar el caso, habían decidido deshabilitar el Autopilot de esa unidad en concreto. La razón era que el actual dueño del coche no había pagado por ése extra, a pesar de que el coche de ocasión se anunciaba con él incluido –el cliente original sí pagó por ello– , algo por lo que Tesla, obviamente, se lava las manos.

La solución que propone Tesla es que el nuevo propietario del Model S pague por este sistema de conducción autónoma, algo que en Estados Unidos tiene un coste de 8.000 dólares, que al cambio son unos 7.400 euros. De hacerlo, se daría la circunstancia de que Tesla cobrase dos veces por el mismo sistema, puesto que no se trata de uno que requiera una suscripción renovable o algo parecido.

Tal y como confirma el portal web Jalopnik, éste no es el primer caso de estas características que protagoniza la firma de Elon Musk, ya sea con el sistema Autopilot o con otro que pueda verse afectado por las actualizaciones de software. Cómo acabe cada uno de ellos ya se verá, pero lo que está claro es que los Tesla de segunda mano van a perder parte de su valor ante esta política.