Rinspeed sQuba: descapotable pero submarino

Sus prestaciones 'marítimas' no son nada del otro mundo, ya que sólo puede sumergirse 10 metros y bucear a 3 kilómetros por hora, mientras que navega a 6 kilómetros por hora sobre el agua. Además, por su condición de coche descapotable, sólo puede permanecer bajo el agua durante una hora antes de que se acabe el aire de los depósitos instalados en el vehículo, ya que el conductor y el acompañante deben ir con boquilla si quieren adentrarse en la profundidad del océano.

Lo más sorprendente de este vehículo son sus discretas prestaciones en tierra, ya que es capaz de alcanzar los 120 kilómetros por hora como velocidad máxima con una aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora en 9 segundos. Eso sí, en un alarde de tecnología y a pesar de ser un coche completamente sumergible, su mecánica es eléctrica. El Rinspeed sQuba cuenta con baterías de ion-litio y tres motores eléctricos. Un propulsor de 54 kW impulsa las ruedas en tierra y los otros dos para la navegación marítima.

Por un precio final aproximado de 1.826.000 euros, el cliente que decida comprarse el Rinspeed sQuba no sólo disfrutará de un descapotable atractivo capaz de ir a una velocidad moderada por tierra y agua, sino que tendrá un deportivo construido en aluminio ampliamente equipado. Y es que el sQuba cuenta con tecnologías de vanguardia en lo que se refiere a la conducción autónoma, a través de un sistema láser. En definitiva, James Bond no tendrá nada que hacer con su Lotus, ya que ni siquiera flotaba. Cosas de Hollywood.