INDY 500

Rebote de Dixon por la ausencia de bandera roja al final de carrera

24/08/2020 16:13

Scott Dixon se mostró sumamente enfadado con los organizadores de las 500 Millas de Indianápolis porque piensa que le arrebataron la oportunidad de ganar al decidir terminar la carrera bajo 'caution' en lugar de detenerla por bandera roja tras el accidente de Spencer Pigot a cinco vueltas del final, para reanudarla una vez la pista estuviera de nuevo en condiciones.

"¡Digerir esto es muy difícil para mí y para el equipo!", ha señalado un enfadado Dixon tras bajarse del coche.

Dixon ha explicado que al ver el accidente de Pigot, pensó que iban a sacar la bandera roja de inmediato por el tamaño y la ubicación del accidente. "No iba a ser una limpieza rápida y me sorprendió que no lo hicieran", ha apuntado.

Los promotores de Indianápolis señalaron que "normalmente no hacen eso" y, desde luego, pueden apoyarse en las estadísticas. En los últimos 20 años ha concluido la carrera bajo 'caution' en ocho ocasiones, aunque ello no ha sucedido en las últimas seis ediciones. No obstante, Dixon apunta que en otras ediciones se ha hecho.

"Para nosotros hubiera sido muy bueno porque Sato hubiera sido un blanco fácil en una nueva salida en las tres vueltas finales de carrera", ha comentado Dixon. Su equipo estimaba que Takuma, sin el incidente, no hubiera podido mantener el ritmo porque se habría quedado sin combustible.

Dixon ha recordado que en la Nascar siguen la política de alargar la carrera para un último giro con bandera verde, lo que en el argot llaman 'el último tiro' y piensa que sería bueno adoptarlo en Indycar, pero los organziadores recordaron que todos los pilotos que corren saben que esto puede pasar. "Nosotros intentamos siempre acabar en verde, pero con tan pocas vueltas no había tiempo para reunir el pelotón tras el coche de seguridad y luego mostrar la bandera roja".

De hecho, Dixon lideró más de media carrera, durante 111 vueltas, pero dejó pasar a Takuma Sato tras el último repostaje porque, tal como admite el equipo, "a ese ritmo, no hubiéramos acabado la carrera" y pensaba que a Sato le sucedería lo mismo. Prefirió estar agazapado y aprovechar rebufos, a la espera del ataque final… aunque reconoce que a cinco vueltas del final "¡hubiera sido mejor estar líder! Pero quizás nos hubiéramos quedado sin combustible y hubiera quedado igualmente en segunda posición".

En cualquier caso, Dixon aumenta su liderazgo. Sus rivales más cercanos acabaron por detrás y Takuma Sato está lejos en el Campeonato. Pero esto no es un consuelo para él ni para Chip Ganassi, que buscaba obtener por fin su primera victoria en Indianápolis; el piloto neozelandés ya lo consiguió en 2008.