Palou quiere salir más líder de Indianápolis
"Cuando comencemos a ganar, la gente se emocionará", respondió Alex Palou a nuestro ‘dire’, Cristóbal Rosaleny, en una entrevista publicada en nuestra web el 31 de diciembre pasado en la que hacía balance de su primera temporada en Indycar y sus perspectivas cara al 2021 con Chip Ganassi.
Seguramente no pensaba en aquel momento que iba a ganar la primera carrera de la temporada, que acariciaría la victoria en la Indy 500 o que sería líder, con cierta ventaja, al entrar en el último tercio del campeonato.
Palou vuelve a Indianápolis para la segunda cita de este año en el trazado ‘Gran Premio’. Vuelve con la ambición de consolidar su liderato y con la tranquilidad de que en la primera visita a este trazado, el primer domingo de mayo, acabó tercero, tras Rinus VeeKay y Romain Grosjean. En otras palabras, el circuito se le da bien; Indy también: tercero en aquella carrera y segundo en las 500 Millas.
Seguramente Chip Ganassi, ‘su patrón’, tampoco lo imaginaba, por más que confiase en Alex. Ni que tres de sus cuatro pilotos –Palou, Scott Dixon y Marcus Ericsson– estuvieran en los cinco primeros lugares y con aspiraciones de título. Una situación que quizás es más difícil de gestionar que la del Team Penske, que puede poner todos ‘los huevos’ en apoyar a Josef Newgarden, quinto en el campeonato; o de McLaren, que puede apostar exclusivamente por Pato O’Ward. No es fácil de gestionar no sólo por el ego de los pilotos, que quieren ganar sí o sí, sino porque cada uno de ellos tiene patrocinios diferentes. En Europa esto sería ‘guerra declarada’, pero en USA las cosas son diferentes y la presión es, al menos aparentemente, menor.
Este final de temporada es un final de ‘guerra generacional’. Los veteranos –Newgarden y Dixon, que han monopolizado los últimos títulos– frente a las nuevas generaciones. Dixon ya supera los 40 años. Newgarden y Ericsson son de la misma quinta, el 90, pero el primero es un veterano que, pese a su edad, está en su décima temporada en la categoría y tiene títulos de la categoría mientras que el sueco está en su tercera temporada. Palou, con 24 años, y O’Ward, con 22, son la generación del futuro.
Curiosamente son los tres pilotos menos experimentados –Palou, O’Ward y Ericsson– los únicos que tienen dos victorias en el casillero. Y los tres se han estrenado en ‘Victory Line’ este año.
¿Qué sucederá en Indy este sábado? Difícil es decirlo. En IndyCar siempre pasan muchas cosas y los pilotos que pueden aspirar a la victoria en una prueba pueden ser, sin problemas, una decena.
Tal como está el campeonato, Palou puede ‘gestionar’ su ventaja, especialmente si alguno de los que por ahora parecen descartados de la batalla final, son los que están delante de la carrera. Rinus VeeKay, Romain Grosjean o Colton Herta, por ejemplo, son de los hombres que deben batallar por la victoria, tanto por reengancharse en la pelea como para dorar su temporada.
Si Palou es líder se debe en buena parte a su regularidad. Sufre un poquito en clasificación –no lo ha hecho en Pole ninguna vez–, pero en carrera sabe remontar y en su box no han cometido errores y han acertado con la táctica. Lo que le da ventaja sobre sus rivales no son sus dos victorias, son que éstas se completan con siete posiciones en los ‘Top Five’ y nueve en los ‘Top Ten’. Sólo Scott Dixon tiene palmarés parecido, con siete plazas en los ‘Top Five’ y diez en los ‘Top Ten’ sobre 11 posibles, pero el neozelandés sólo tiene una victoria. De ahí los 42 puntos de desventaja sobre Palou.
Sobre el papel, Palou debe seguir siendo líder tras la prueba de este domingo. Pero Alex quiere salir ‘más líder’, a ser posible acabando al menos por delante de sus inmediatos seguidores. Pero no piensa ‘gestionar’ en clave de campeonato: buscará la victoria porque –como decía Michael Schumacher y Palou lo ha adoptado– ‘los títulos son consecuencias de éstas’. Sólo cuando la carrera esté definida quizás pensará en asegurar en lugar de arriesgar. O lo pensarán desde el muro de boxes.
Quedan sólo cinco carreras. Unos se juegan el seguir manteniendo opciones. Otros, el contrato de 2022. Y los de cabeza, mandarlo todo a hacer puñetas si cometen un error. Por eso Palou tiene una cierta ventaja con su ‘colchón’.
En otro orden de cosas, si el domingo pasado en Nashville tuvimos 27 coches, en Indy habrá 28, uno más. Christian Lungaard hace su debut en Indycar con Rahal. Llega el tep Ton Gun, por fin preparado para debutar, sigue Hélio Castroneves como parte de su preparación para la ‘rentree’ a tiempo completo en 2022.
Hay que remontarse a 2011, hace una década, a Sonoma o Baltimore para encontrar tantos coches en un circuito urbano o rutero. Y habría que retroceder diez años más para encontrar anteriores precedentes: Long Beach y Laguna Seca.
ASÍ VA EL CAMPEONATO TRAS 11 CARRERAS DE 16
Alex Palou - 410 puntos
Scott Dixon - 368 puntos
Pato O’Ward - 362 puntos
Josef Newgarden - 335 puntos
Marcus Ericsson - 331 puntos
Graham Rahal - 286 puntos
Simon Pagenaud - 280 puntos
Colton Herta - 275 puntos
Rinus Veekay - 263 puntos
Takuma Sato - 231 puntos
