Muere Oscar Scaglietti tras una vida dedicada a Ferrari
Ferrari llora la muerte de Oscar Scaglietti, hijo del famoso carrocero italiano Sergio Scaglietti. Tenía 74 años y ha fallecido víctima de una enfermedad que arrastraba desde hace tiempo. Su estado de salud empeoró a principios de mes por culpa de una fiebre repentina, aunque su entorno ha remarcado que no se trataba de coronavirus.
Oscar era uno de los dos hijos de Sergio Scaglietti, que le instruyó en el oficio del automóvil cuando apenas tenía 13 años. Dio sus primeros pasos y ganó experiencia en Pininfarina, pero luego dio el salto a Maranello para involucrarse en el día a día de Ferrari, donde trabajó codo con codo con Mauro Forghieri.
El taller familiar trabajó en la carrocería de obras maestras del calibre del Ferrari 250 Testa Rossa o el Ferrari 250 GTO, que con el paso de los años se ha consolidado como el vehículo más mercado en el mercado de coleccionistas. Su padre Sergio era amigo de Enzo Ferrari. Ahí también trabajaba con su hermano Claudio, que se ocupaba de la contabilidad.
Oscar dedicó seis décadas a la empresa, jugando un papel protagonista en los éxitos de Ferrari desde el año 1958. Con 17 años trabajó en la carrocería de cuatro unidades del Ferrari 250 GTO. El apellido familiar recibió un homenaje en 2004 con el Ferrari 612 Scaglietti, un gran turismo de 540 caballos diseñado por Pininfarina.
Ahora la división Scaglietti está integrada en el seno de Ferrari. Oscar permanecía activo como embajador. De hecho, tenía previsto acudir este mes de marzo a un evento de coches clásicos, pero tuvo que cancelar su asistencia tras sentirse indispuesto. En enero de este mismo año participó en una celebración en Turín en homenaje al centenario de su padre Sergio, que falleció en 2011.
El Ferrari 250 GTO ha alcanzado un máximo de 48 millones de dólares en subastas, lo que lo convierte en el coche más caro del momento.
