Marcas de coches paran su publicidad en Twitter tras la llegada de Musk
Volkswagen y Audi han suspendido su publicidad en Twitter a raíz de la venta de la compañía a Elon Musk, que también es fundador y director de Tesla.
Las firmas automovilísticas aprovechan las redes sociales para interpelar a su público, como cualquier otra empresa. Pero ahora son tiempos inciertos a raíz de los cambios en la cúpula de Twitter.
La red social es propiedad de Elon Musk desde hace una semana, lo que significa que ahora mismo el ágora de Internet está controlada por la misma persona que lidera la marca de coches más valiosa del mundo.
Los fabricantes tradicionales han adoptado una posición cauta desde entonces.
Citroën reconoció la paradoja con un irónico mensaje: "Saludos desde la red social propiedad de nuestros competidores".
Otras marcas han sido menos vocales, pero han adoptado medidas más importantes.
A las pocas horas de confirmarse la venta de Twitter, General Motors suspendió temporalmente su inversión en publicidad.
"Estamos hablando con Twitter para entender qué dirección tomará la plataforma bajo sus nuevos dueños”, dijo la firma estadounidense en un comunicado.
"Como es habitual en los grandes cambios, hemos pausado temporalmente nuestra publicidad pagada. Nuestra atención a los clientes en Twitter continuará".
Poco después, Ford dio el mismo paso.
"No nos estamos anunciando en Twitter actualmente", dijo un portavoz de la marca del óvalo a la revista Forbes. "Evaluaremos qué dirección toma la nueva propiedad de la plataforma".
Ahora, dos marcas del Grupo Volkswagen –Volkswagen y Audi– también han pausado su publicidad según adelanta el The Wall Street Journal.
La industria automotriz no es la única que sigue con recelo la evolución de Twitter. La farmacéutica Pzifer también ha parado su publicidad en la plataforma, por ejemplo.
Entre los argumentos para hacerlo destacan la expectativa por cómo se definirá la política de moderación de contenidos y la incertidumbre por los cambios de personal. Musk tiene intención de despedir a la mitad de la plantilla.
La venta de Twitter se cerró por 44.000 millones de dólares.
El mismo Elon Musk se ha pronunciado al respecto en las últimas horas:
"Twitter ha sufrido una caída masiva de sus ingresos debido a grupos activistas que presionan a los anunciantes, a pesar de que no ha cambiado nada en la moderación de contenidos y hemos hecho todo lo posible para calmar a los activistas".
"Están intentando destruir la libertad de expresión en América".
