LIUX: La marca española que quiere ser la Tesla europea de los coches urbanos presenta el Geko

El modelo de negocio es diferente: se trata aquí de coches de dos plazas para uso urbano y para compañías alquiler de vehículos. El Geko es perfecto para lugares turísticos con pocos kilómetros de recorrido, como las islas españolas, o en centros urbanos, donde puede llegar en formato de car-sharing y convertirse en el segundo o tercer coche de muchas familias, o el coche único de jóvenes o público sénior.

Para ello, LIUX ofrece un coche plagado de diseño, tecnología y ecología. La característica principal de Liux es su fabricación con materiales totalmente reciclables, en particular la carrocería de fibra de lino, tan resistente como la de carbono pero recuperable una vez que termina la vida útil del coche, y más barata de producir, aunque su proceso no sea tan rápido como la estampación de chapa o la inyección de plástico. En todo caso, el Geko no ha querido abandonar esta cualidad y la acompaña de un diseño brillante.

EL ESPÍRITU DE SMART… EN 2025

Uno de los fundadores de LIUX, David Sancho, es diseñador de automóviles, pero ha dejado la labor a su profesor en el máster de diseño de la Politécnica de Valencia, Antonio Garrido. Tras contratar a algunos alumnos del propio máster, han creado un coche desde cero que nada tiene que envidiar a los de otras marcas europeas o a los diseños que llegan de China. Tiene 2,7 metros de largo, 1,5 de ancho y es muy atractivo, futurista y tiene un aspecto premium dentro del mercado de los microcoches. El ejercicio no es solo de estilo, también de ingeniería: se han usado muchas piezas ya homologadas, como cristales, faros, pilotos o retrovisores, para acortar los costes y tiempos de desarrollo. El concepto recuerda al Smart original de dos plazas; no en su diseño, sino en la osadía de lanzar un producto estéticamente atractivo en un segmento de bajo tamaño y precio.

170 O 230 KILÓMETROS DE AUTONOMÍA

A nivel técnico, se apuesta por un eje trasero motorizado con un motor eléctrico de alta potencia… que permanecerá limitado en las versiones destinadas a la conducción con el carnet L7, segmento al que llega este coche. Las baterías disponibles son dos: 13,5 kilovatios hora con 170 kilómetros de rango o 18,9 con 230 kilómetros de autonomía. Las baterías son ampliables e intercambiables si así lo deseamos.

Suspensiones, frenos y dirección son ya funcionales en este proyecto, que no es un prototipo “de salón” sino que se mueve, y se mueve bastante bien. De hecho, con una agilidad sorprendente para su tamaño. La marca lo ha presentado en Mallorca, en la sede de OK Mobility, uno de los principales alquiladores de coches en Europa y uno de los principales inversores en Liux y que ha cerrado un acuerdo para comprar 5,000 unidades para su flota.

Con esos pedidos bajo el brazo y con el interés de muchos fabricantes que buscan coches baratos y económicos para su catálogo, Liux quiere empezar a fabricar su coche. Hay tres vías posibles: empezar una fábrica desde cero, que ya ha sido diseñada y requeriría al menos doce meses de obras, con una inversión de 300 millones de euros. La segunda opción es usar fábricas de coches ya existentes mediante acuerdos con otro fabricante. La tercera es fabricarlo en China, que es lo más lógico empresarialmente, pero no es el objetivo de los socios, accionistas e ingenieros de Liux, sino crear riqueza en Europa.

¿ES VIABLE UNA TESLA ESPAÑOLA?

Pero ¿es viable un proyecto de este tipo? Hace diez años habríamos dicho que no, pero estamos en 2024, y las 'startups' 'levantan' dinero para proyectos mucho menos tangibles que este. LIUX debe trabajar ahora en capitalizar la empresa, pero debe huir del negocio tradicional: este coche debe ser muy digital, poder tenerlo, cargarlo, alquilarlo y conducirlo por medio de una app que permita a sus propietarios, sean empresas o particulares, alquilarlos y usarlos sin intermediación física. Ese puede ser su nicho y su éxito. La vía tradicional de crear una marca y red comercial es la más compleja y se parece demasiado a un mercado ‘tradicional’ en desuso.

Liux tiene un buen ejemplo de Ebro, que termina de lanzarse al mercado bursátil con un éxito que le va a permitir afrontar las inversiones para fabricar coches traídos desde China con cierto margen operativo. Hay confianza en España para una Tesla de pequeño tamaño que, a base del impulso de inversores y accionistas, tenga unos años de margen para poder alcanzar una rentabilidad muy posible con un producto como este. ¿Lo conseguirá LIUX? Esperamos que sí. No solo ganaríamos un fabricante más en España y en Europa, sino que sus coches son bonitos, ecológicos y reciclables, por lo que cada vez que se venda uno, ganamos todos.