MERCADOS

La investigación a Wolff y Stroll, archivada

25/08/2021 08:33

Los reguladores financieros han descartado el posible uso de información privilegiada por parte de Toto Wolff cuando compró las acciones de Aston Martin, según informa el diario Financial Times.

El organismo de control de mercados alemán –BaFin– no ha encontrado pruebas para sustentar una investigación de uso de información privilegiada y así lo ha comunicado a su homónimo británico FCA, aunque al parecer éste no ha llegado a comenzar ninguna investigación.

Toto compró acciones de Aston Martin, empresa liderada por su amigo Lawrence Stroll en el 2020, alrededor de un 0,95%, lo que al valor actual de las acciones supone unos 16,1 millones de euros.

Toto tiene además un tercio del equipo Mercedes-AMG de Fórmula 1, mientras que Stroll está al frente y es el accionista mayoritario del equipo Aston Martin de F1, sociedad separada de la empresa Aston Martin y a Tobias Moers, exdirector de AMG, lo nombraron director ejecutivo de Aston Martin.

El grupo Daimler también posee un porcentaje minoritario de Aston Martin, desde 2013, mucho antes de que un grupo inversor liderado por Lawrence Stroll se hiciera con el control de la compañía. El octubre pasado Daimler anunció que tenía previsto aumentar de forma sustancial su presencia en Aston Martin gracias a una cesión de tecnología, pasando del 5% al 20%.

El equipo Aston Martin de F1 utiliza motores Mercedes, pero Mercedes también suministra motores y cambios a Aston Martin para sus coches de serie y aunque el equipo y el fabricante de automóviles tiene a Stroll y algunos accionistas en común, son entidades absolutamente separadas.

No está claro si se creía que Toto había logrado esta presunta información por parte del grupo alemán o de Lawrence Stroll. Daimler declaró que Toto no estaba ni está al corriente de las decisiones del grupo.

Las ventas de Aston Martin este año han aumentado de forma espectacular, impulsadas por el SUV DBX que la marca ha lanzado de forma reciente. En los seis primeros meses del año vendió 2.901 unidades –frente a las 1.059 de 2019 y unas 1.300 el año pasado–, de las que algo más de la mitad corresponden al DBX, lo que aumentó sus ingresos respecto al año pasado en unos 153 millones de euros.