¿La batería ideal para deportivos eléctricos? Crean un prototipo para demostrar que funciona

El Nyobolt EV, con sus 450 caballos de potencia, no es un deportivo destinado a dar a conocer su tecnología, pero a buen seguro muchos desearían que se hiciera realidad. Menos de 5 minutos sirven para que su batería pase del 10% al 80%, lo que se transforma en una recuperación de 190 kilómetros en apenas cuatro minutos con un cargador de 350 kilovatios de potencia.

No es un deportivo al uso, sino que se conforma 450 caballos de potencia. Pero, en contrapartida, puede que resulte tanto o más divertido de conducir porque su secreto está en el peso: sólo 1.250 kilos.

Hace honor a la máxima de Colin Chapman, uno de los mejores ingenieros de la historia de la automoción, fundador de Lotus, en su día el equipo de Fórmula 1 más avanzado. ‘No importa el motor sino los kilos’.

El diseño tiene muchas similitudes con el primer Tesla, el famoso Roadster…. y no es para menos. Ambos parten de un Lotus. El Tesla Roadster partió del Elise y el Nyobolt lo hace a partir del Exige.

Ha sido diseñado por Julian Thompson, el creador del Elise original. Thompson se lo encargó a Callum, la empresa fundada por Ian Callum, de quien hemos hablado recientemente.

Es un coche de pequeñas dimensiones, menos de 3,80 metros de largo. El chasis ha sufrido algunas modificaciones para poder albergar una batería de 35 kilovatios hora, muy pequeño con respecto a las que ofrecen otros automóviles eléctricos de corte deportivo, que suelen tener una el doble de grande. Es un sistema de 800 voltios.

Para Nyobolt, lo importante es demostrar la eficacia de sus baterías.

Son más pequeñas y ligeras que las que imperan en el mercado, se adaptan mejor a recargas rápidas, se reciclan de forma más fácil, soportan más ciclos de carga –casi 500.000 kilómetros sin pérdida significativa de carga, dicen– y recurren a materias primas más accesibles.

Estas baterías usan ánodo de óxido metálico y carbono las celdas son de baja impedancia y tienen un diseño exclusivo para conseguir alta densidad energética.

Todo ello redunda en un precio menor. Es más, son eficaces todavía tras 4.000 ciclos de carga, lo que equivaldría prácticamente a un millón de kilómetros.

Nyobolt no tiene planes para comercializar este vehículo, aunque ha despertado interés suficiente como para pensar en una corta serie de 25 unidades. Algo que puede rodar por la cabeza de los impulsores del proyecto.

El coche estará en el Goodwood Festival, donde a buen seguro atraerá las miradas de los curiosos. Sin embargo, para Nyobolt lo verdaderamente importante es que los grandes fabricantes de automóviles se fijen en su tecnología y confíen en ello para impulsar nuevos deportivos.