El 30% de los turismos que circulan por Barcelona son Eco o Cero

En otras palabras, el porcentaje de los vehículos eléctricos e híbridos o que usan gas –ya sea Gas Natural, GLP o GNC– se empieza a acercar mucho al 30%. Un porcentaje que quizás se alcance a final de este año puesto que los datos corresponden a septiembre.

La ZBE de Barcelona es todo el perímetro encerrado por las Rondas, e incluye prácticamente todo Hospitalet y buena parte de Cornellá. Y hay una excepción para la Zona Franca, así como una extensión a zonas del 'Valle Hebrón' situadas justo encima de la Ronda. La ZBE está vigente de lunes a viernes de 07:00 a 20:00 horas.

El Ayuntamiento de Barcelona señala que los coches con distintivo amarillo –Etiqueta B– son sólo el 18,1% frente al 24,8% de los Eco. También han aumentado hasta el 4% los vehículos cero emisiones. Los automóviles más numerosos tienen la etiqueta verde, la Etiqueta C, representando un 54%.

La diferencia de porcentaje de los 'Eco' sobre los 'B' adquiere mayor relevancia porque no fue hasta febrero de este año cuando se produjo la inversión. Hasta entonces los 'B' habían estado por delante. En apenas seis meses la diferencia ha subido a seis puntos y medio.

En 2017 los coches de etiqueta 'B' representaban el 40%. Obviamente no es que se hayan reducido a la mitad, sino que el parque también ha crecido.

Lógicamente ya no se venden coches nuevos de Etiqueta B, pero también es de resaltar que los coches con este distintivo han desaparecido prácticamente del mercado de ocasión de Barcelona y parte de su cinturón.

Hay que tener en cuenta que se está comenzando a gestar un movimiento para vetarlos en la ZBE en los próximos años. Una posibilidad que por el momento el ayuntamiento no quiere confirmar. La implantación de la ZBE ha contribuido a una renovación del parque y a un descenso de los niveles de contaminación en la ciudad.

Se espera que a finales de 2023 todas las estaciones de medición de calidad del aire cierren por vez primera con un índice de NOx inferior a los 40 microgramos por metro cúbico, límite marcado por la normativa europea y cuya superación puede conllevar una cuantiosa multa.

Con todo, la edad media de los vehículos en Barcelona es de 11,2 años, mientras que en el conjunto del estado es de 13,9. Y el Ayuntamiento trabaja ya de cara a 2030, cuando la norma europea prevé rebajar el límite de emisiones de NOx a la mitad del actual.

No se han facilitado datos sobre furgonetas y camiones, pero en este campo se trabaja no ya en lo que a vehículos se refiere sino también en racionalizar el reparto de distribución, al menos a particulares, actividad que va al alza y que comienza a ser un problema para la circulación y las emisiones.