El Tesla Model S P100D del EGT supera los crash-test de la FIA
El Tesla Model S P100D EGT, el coche con el que se inaugurará el primer Campeonato europeo eléctrico de GTs, ha pasado los crash-test de seguridad de la FIA y ya cuenta con el visto bueno de la Federación para salir a pista.
Desde mediados del año pasado, el Campeonato EGT –Electric GT Championship– ha empezado a sentar las bases para debutar en 2018 en las pistas de los principales circuitos europeos en el que será la primera categoría de la FIA de coches GT totalmente eléctricos.
En principio, no habrá coches, sino coche. Los diez equipos y veinte pilotos que participarán en el primer año usarán todos el mismo Tesla Model S P100D adaptado a la competición, y desde hoy mismo, con verificación de seguridad de la FIA.
El test se ha llevado a cabo en la IDIADA –Instituto de Investigación de Tecnología Aplicada a los Automóviles–, en su centro de Barcelona. Para hacerlo, la empresa OMP ha equipado a este Tesla para resistir el impacto contra un muro de 130 toneladas con una placa de 19 milímetros de madera, a una velocidad superior a los 50 kilómetros por hora.
En el momento del impacto, las baterías del coche estaban activas y cargadas siguiendo las instrucciones del proveedor y la FIA. En el asiento del conductor, había un peso de 88 kilogramos. El vehículo en total pesaba 1.720 kilogramos, que es el peso máximo de una carrera del Campeonato de EGT contando con el piloto.
"Estamos muy satisfechos de haber pasado los crash-test. No había ninguna duda sobre la seguridad de nuestras carreras, porque siempre ha sido nuestra prioridad. El coche se comportó muy bien en la colisión. Estamos muy emocionados por empezar a competir en 2018", ha analizado el CEO del EGT, Mark Gemmell.
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