Breadvan Hommage: la recreación del Ferrari 250 SWB Breadvan

Puede decirse que Jack Glickenhaus y el precioso Ferrari P4/P5 que encargó a Pininfarina fue el precursor de todos ellos. Pero desde entonces hay muchos ejemplos, por ejemplo inspirado en el Lancia Stratos, el Alfa Romeo TZ o el Aston Martin Zagato.

La última incorporación a esta filosofía es el Breadvan Hommage de Niels van Roij Design, una versión moderna del Ferrari 250GT SWB Breadvan de 1962.

El modelo original fue un encargo del conde Giovanni Volpi, que quería un coche de competición destinado a pelear con los Ferrari 250 GTO, los coches más cotizados –y con diferencia– en el mundo de las subastas.

Volpi era un gran amante del deporte del motor. Su equipo se llamaba Scuderia Serenissima y llegó a hacer un motor de Fórmula 1 que fue usado por McLaren en su primera temporada.

Encargó a Giotto Bizzarrini –mítico ingeniero que construyó grandes deportivos con marca propia– que acababa de dejar Ferrari –donde había trabajado en la realización del GTO– que le transformara su 250 GT SWB para enfrentarse al GTO.

El nombre de 'Breadvan' fue su denominación popular por su parte trasera 'cola tronca' o 'cola de Kamm', en homenaje al ingeniero que la ideó, con una amplia portezuela posterior, les recordaban un horno de pan.

Van Toij, holandés de origen, pero cuyo estudio de diseño está en Londres, se ha especializado en ejemplares únicos. Ha tomado un Ferrari 550 Maranello como base mecánica, en la que sólo ha introducido una modificación: unos amortiguadores Koni regulables, un guiño a Koni que ofreció los amortiguadores del modelo original.

El 550 Maranello tiene un motor delantero central 5.5 V12 de 478 caballos, con una transmisión manual de 6 velocidades 'transaxle'.

Es la zona posterior es donde se marcan los grandes cambios con el Maranello, aunque en realidad sólo se conserva el parabrisas de éste en la carrocería. La voluminosa zona posterior incluye grupos ópticos redondos colocados verticalmente en cada extremo.

En la zona delantera hay rejillas de ventilación en las aleras delanteras, tomas de aire en el capó al estilo del Breadvan y también la burbuja de plástico trasparente que deja ver las trompetas de admisión del motor. La rejilla delantera ha sido remodelada y ahora incluye un par de luces antiniebla.

El interior también ha sido trabajado. Los asientos tienen una base de fibra de carbono y van tapizados el Alcántara azul, con un embellecedor, un bordado que recrea la silueta del deportivo. Embellecedores en aluminio fresado, acolchados en cuero negro.

Van Roij ha tardado dos años en completar el proyecto. No ha aclarado si ha sido proyecto propio para vender o bien un encargo. Pero en cualquier caso la factura seguro que es de más de seis dígitos.