BMW retrasa el debut de su batería de estado sólido

Para BMW, el futuro más inmediato es el estreno de su segunda generación de coches eléctricos. Se engloba bajo el nombre Neue Klasse y engloba toda una serie de avances tecnológicos, desde baterías hasta plataforma, que permitirán dar el siguiente paso cualitativo.

Desde Bavaria, la marca calcula que su nueva celda de batería tendrá un 30% más de autonomía que en la actualidad. Esto con un incremento del 20% en la densidad energética y del 30% en la velocidad de carga, por no mencionar los costes que bajarán a la mitad.

Éste es el futuro de las baterías de iones de litio. La Neue Klasse. Pero, en paralelo, BMW también lleva tiempo trabajando en las baterías de estado sólido, que se perfilan como una opción dominante a medio y largo plazo si los fabricantes dan con la tecla.

En abril de 2021, BMW dijo que quería "enseñar el primer coche con esta tecnología mucho antes de 2025" y que el primer vehículo de producción con este recurso sería una realidad "antes de que termine la década".

Pero ahora parece que la batería de estado sólido se hará esperar un poco más. Kurt Vandeputte, responsable del Centro Competencial de Manufactura de Celdas de Batería de BMW, ha enfriado las expectativas.

"No veremos un BMW de producción con batería de estado sólido antes de 2030", ha dicho en declaraciones reproducidas por BMW Blog.

Esta declaración ocurre a pesar de que BMW recibió este mismo noviembre los prototipos de sus primeras baterías de estado sólido, que han sido desarrolladas por Solid Power. Es probable que en los próximos meses veamos un primer vehículo experimental que las usa, pero su aplicación comercial se hará esperar un poco más.

Las baterías de estado sólido prometen un nivel de autonomía superior que la tecnología actual, al mismo tiempo que una mayor rapidez de carga y seguridad en caso de accidente. Algunas previsiones hablan de una densidad energética tres veces superior y una velocidad de carga hasta seis veces más rápida.