Blade Runner va a por Elon Musk: la presentación del Robotaxi llega ahora a los juzgados

El mundo se paró el pasado 10 de octubre para ‘We Robot’, el evento en el que Tesla dio a conocer dos grandes innovaciones: su Robotaxi con coches completamente autónomos y los robots Optimus, que cada vez son más realistas. Los invitados pudieron subirse al vehículo autónomo y darse una vuelta por un escenario inspirado en un plató de cine y los androides interactuaron con el público de una forma excepcionalmente humana, lo que ha derivado en un sinfín de contenido viral en redes sociales.

A las pocas horas de terminar la presentación, sin embargo, empezaron a surgir las primeras dudas. Algunos invitados se dieron cuenta de que cada robot hablaba con una voz distinta, como si en realidad hubiera un humano real al otro lado interactuando con el público a través de un altavoz. Comunicadores de primer nivel, como el mismo Marques Brownlee, respaldaron esta teoría, que a su vez permitiría poner en duda todo lo demás que se vio aquel día: si los robots no son tan avanzados como Tesla pretende hacer creer, ¿por qué los coches sí deberían serlo?

Toda esta incertidumbre se trasladó rápidamente a la bolsa, donde las acciones de Tesla cayeron cerca de un 10% en las siguientes horas porque los inversores no se creyeron lo que Elon Musk dijo desde el escenario.

Ahora, sin embargo, el evento We Robot tiene una nueva derivada que no habíamos visto venir: una denuncia de los productores de Blade Runner.

Los denunciantes argumentan que la puesta en escena del evento de Tesla guardaba demasiados parecidos con la película Blade Runner 2049. Aseguran que Tesla vulneró su copyright al intentar crear una estética que establecía una conexión entre la tecnología de su empresa y el film.

“No fue casualidad que la única película de Hollywood que Musk habló para promocionar su nuevo ciber-taxi completamente autónomo fuera Blade Runner 2049, una película que casualmente presenta un automóvil completamente autónomo, con inteligencia artificial y un diseño inteligente”, reza el texto de la denuncia.

“Los acusados habían pedido permiso a Alcon –la productora– para usar Blade Runner 2049. Se les había negado firmamente. Fue una táctica maliciosa y de mala fe por parte de los acusados para hacer que el evento fuera más atractivo para la audiencia global, apropiándose indebidamente de la marca Blade Runner 2049 para ayudar a vender Teslas”.

Los denunciantes aseguran que “la magnitud financiera de la apropiación indebida es sustancial”, porque Blade Runner tiene sus propios acuerdos con marcas de la automoción y ahora están en negociaciones para la serie de televisión Blade Runner 2099. La aparición de Tesla en escena, aseguran, puede poner en peligro todos estos acuerdos.