El Gobierno estudiará el veto al Diesel en Baleares desde 2025

El pasado mes de febrero se aprobaba la ley que prohibía la circulación de los vehículos Diesel en Baleares a partir 2025 y de los gasolina diez años más tarde. Ahora, el Gobierno central afirma que va a investigar si esta normativa no ha incurrido en ninguna inconstitucionalidad a través de una Comisión Bilateral de Cooperación. La creación de este órgano se produce porque el Ejecutivo español ha detectado algunas partes de la normativa que pueden no estar de acuerdo con la ley. El análisis, del que puede derivar una solución o una modificación de la ley, se conocerá en un plazo de nueve meses.

Recordemos que éste no es el único obstáculo que se le ha presentado últimamente a la ley aprobada en Baleares. Incluso antes de que ésta se diese por buena, Anfac presentó una denuncia ante la Comisión Europea, que aún espera resolución. En cualquier caso estamos ante una ley pionera en España que desde el principio ha tenido muy buena acogida entre las asociaciones ecologistas, todo lo contrario que en la industria del automóvil. Según Anfac, las medidas previstas en Baleares son arbitrarias y desproporcionadas, ya que carecen de respaldo técnico o científico. Además generan un impacto negativo en el sector, que sólo ha crecido un 1,6% en Baleares el pasado año, mientras que en España la media es del 7%.

El objetivo que persigue la Ley de Cambio Climático y Transición Energética es que Baleares pueda nutrirse totalmente de energías renovables desde el año 2050. De esta forma se plantean las mencionadas prohibiciones al sector de la automoción. No obstante, el año que marca el punto de inflexión es 2030, cuando se prevé que ya el 35% de las energías sean renovables, lo que reducirá en un 40% las emisiones contaminantes. A este respecto Marc Pons, conseller de Territori, ha dicho que "lo importante es que hay una hoja de ruta con un calendario en el tiempo, cuyo cumplimiento garantiza llegar al año 2050 habiendo hecho posible la materialización de los acuerdos de París".

A pesar de lo duro de este calendario, los ciudadanos residentes en Baleares pueden respirar tranquilos. Las sucesivas prohibiciones a los vehículos con motores Diesel y de gasolina no les afectan, siempre y cuando ya posean uno. Podrán utilizar estos vehículos hasta el final de su vida útil. Tampoco afectará a las matriculaciones de nuevos vehículos, pero estos no podrán circular, sin duda una forma de forzar al cliente a apostar por energías alternativas. El resto de usuarios tendrán que acogerse a la nueva normativa, que prohíbe la circulación de vehículos Diesel desde 2025 y de gasolina desde 2035.

Las empresas de alquiler tienen también tarea ante la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que marca que su flota tiene que ser totalmente eléctrica para el año 2035. Este sector calcula que el coste de la sustitución de sus actuales vehículos puede ser de unos 70 millones de euros, para lo que contará con ayudas del Gobierno. Éste también instalará 1.000 puntos de recarga para eléctricos en 2025.