Accidentes con animales: cómo actuar para evitarlos o mitigarlos

Los accidentes con animales son más comunes de lo que parecen. De las cinco especies más comunes que los provocan se encuentra en las dos primeras posiciones los perros y los jabalíes. En 2018 se produjeron 599 accidentes por esta causa en vías interurbanas, 510 de los cuales en carreteras convencionales según datos del Race. En 2015 hubo 407 siniestros de este tipo, lo que demuestra que ha habido un aumento del 25%. ¿Sabemos actuar cuando vamos a tener un accidente de este tipo? Te contamos cómo.

Lo primero, obviamente, es pisar el freno lo más posible para reducir la velocidad. Mientras se hace esto hay que mantenerse recto. Dar un volantazo para esquivar al animal mientras se frena va a provocar una descompensación del peso del vehículo que derive en una pérdida de control que puede ser fatal. Incluso puede dar con nuestros huesos en el carril contrario.

Si el impacto frontal con el animal es inevitable, lo importante es haber respetado las normas de tráfico en cuanto a velocidad y distancia de seguridad. A 80 kilómetros/hora se puede detener el coche en 60 metros, distancia suficiente para avistar al animal. La distancia de seguridad tiene que ver con que nos permita vislumbrar lo que sucede delante del coche que nos precede.

Otra de las cosas que puede evitar los accidentes con animales es tocar el claxon cuando veamos uno. Eso puede asustarlo y provocar que empiece a moverse de manera impredecible. Además, cuando se rebase al animal ha de hacerse a muy baja velocidad por lo mismo, evitar reacciones que no esperemos.

Si avistamos un animal de noche y circulamos con las luces de carretera es recomendable cambiar a las de cruce. Si lo deslumbramos es probable que se quede parado en mitad de la carretera. Y ojo, porque es extraño que un animal esté solo. Si ves uno en la carretera es posible que en los alrededores haya más.

¿Y si por desgracia no eres capaz de evitar el impacto? Te contamos en este artículo quién tiene la responsabilidad en el caso de que se produzca un accidente con animales.