A 450 kilómetros/hora con un cabrio: así ha pulverizado el Bugatti Mistral todos los récords

El W16 Mistral ha llegado a una velocidad increíble de 453,91 kilómetros/hora, muy por encima de los 408,84 kilómetros/hora que alcanzó la variante descapotable del Bugatti Veyron –Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse– en 2013 para reclamar este mismo récord, que en 2017 había pasado a manos del Hennessey Venom GT Roadster –426,47 kilómetros/hora–. Esta cifra se sitúa por encima incluso del récord absoluto de un coche de producción, que está en manos del Koenigsegg Agera RS –447,19 kilómetros/hora–.

¿Significa que estamos ante el coche más rápido de la historia? La respuesta es que no. Bugatti ya llegó a 490 kilómetros/hora con el Chiron Super Sport 300+ en 2019, pero la versión que se comercializaba de ese coche estaba limitada de forma electrónica a 440 kilómetros/hora. Y existen motivos para pensar que el W16 Mitral podría encontrarse en la misma situación, lo cual haría que todos sus registros se tengan que coger siempre con pinzas.

Sea como sea, los 453,91 kilómetros/hora del Bugatti W16 Mistral llegan en la víspera de que Hennessey haga un esperado intento oficial con su Venom F5 Roadster. Hennessey ha dicho que quiere ir a por el récord de velocidad para descapotables antes de que termine el año y su coche, que supera los 1.800 caballos de potencia, ha sido diseñado para romper la barrera de los 480 kilómetros/hora. De conseguirlo, eso haría que el reinado del W16 Mistral sea de lo más efímero. De hecho, este verano el F5 Roadster ya hizo un intento de milla en el que llegó a 352,44 kilómetros/hora en apenas 402 metros de aceleración.

Sea como sea, Hennessey aún no ha ido a la pista. Bugatti sí que lo ha hecho. Su intento tuvo lugar en el circuito de pruebas de Papenburg, en Alemania, y detrás del volante estuvo el piloto Andy Wallace, el mismo que en su momento llegó a 490 kilómetros/hora con el Chiron Super Sport 300+. La fecha estaba señalada en rojo en el calendario y nadie se la quiso perder, ni siquiera el flamante consejero delegado de Bugatti Rimac, Mate Rimac.

Wallace dio una vuelta de preparación al óvalo de Papenburg para llevar los neumáticos a la temperatura ideal. Negoció el peralte a una velocidad constante de 200 kilómetros/hora y luego, en cuanto llegó a la recta principal, piso a fondo para exprimir los 1.600 caballos de potencia de su motor W16 de 8.0 litros. Alcanzó una velocidad de 453,91 kilómetros/hora, muy por encima de los 408,8 kilómetros/hora del predecesor espiritual de este coche –el Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse–.

“Todo el programa de pruebas nos ha llevado hasta este momento y es increíble lo estable que se ha sentido el coche”, dijo el piloto después de terminar el intento. “Me he quedado con la sensación de que el coche quería ir más rápido”.

“La experiencia ha sido sobrecogedora. Sentir el cielo abierto, el sonido del enorme motor W16… Todo ha hecho que el hito sea increíblemente emocional. Un récord como éste fuerza los límites de la innovación y requiere de una concentración y dedicación inmensas, y de trabajo en equipo. Es una buena demostración de la pasión que tiene toda la gente de Bugatti por hacer historia”.

El Bugatti W16 Mistral es el primer y único coche descapotable creado sobre la base del Chiron. Presentado en 2022, es el último modelo de Bugatti en recurrir a la motorización W16 y su producción está limitada a tan sólo 99 unidades, a razón de cinco millones de euros cada una.

El W16 Mistral representa el canto del cisne, porque ahora toda la atención de Bugatti está centrada en su nuevo hiperdeportivo: el Tourbillon. Presentado a mediados de 2024, es el reemplazo del Chiron y sube la apuesta con una potencia de 1.800 caballos y tres motores eléctricos. Se trata del primer buque insignia híbrido enchufable de la historia de la marca y el primero bajo el liderazgo de Mate Rimac.