¿Ha bajado la DGT el margen de error de sus radares de velocidad? La respuesta es no

Seguro que has leído alguna noticia referente a los nuevos márgenes de error que tiene en cuenta la Dirección General de Tráfico en sus radares de velocidad, tanto fijos como de tramo y móviles. Lo cierto es que no hay ninguna comunicación oficial al respecto, por lo que no se puede dar por válida esta afirmación.

Lo que sí hay publicado desde febrero de 2020 es la "Orden ICT/155/2020, por la que se regula el control metrológico del Estado de determinados instrumentos de medida". En ella, se da pie a que se pueda ajustar el margen de error de instrumentos de medición, como pueden ser los radares. Pero no es ninguna propuesta de la DGT ni nada aprobado por la misma. Es una publicación en el Boletín Oficial del Estado por parte del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

Esto quiere decir que los radares de tráfico que se hayan homologado desde febrero de 2020, podrían aplicar un nuevo margen de error del 3 kilómetros/hora o del 3% extra de la velocidad por encima de los 100 kilómetros/hora.

Pero esto ni ocurría antes, ni ocurre ahora ni, por el momento, ocurrirá en ninguno de los radares de la DGT. Así lo hemos podido confirmar con una fuente perteneciente a la Guardia Civil, y lo cierto es que otras con las que hemos contactado ni siquiera sabían de este asunto.

Por tanto, el margen de error aplicado en los radares es de 5 kilómetros/hora en el caso de los denominados dispositivos fijos, también si se trata de radares de tramo o radares móviles en estático, y hasta los 100 kilómetros/hora. A mayor velocidad se aplica un margen del +5%.

En radares móviles, entendiéndose como los montados en un vehículo de Tráfico que está en movimiento, el margen de error de su dispositivo sancionador es de 7 kilómetros/hora hasta los 100 kilómetros/hora y a partir de esa velocidad empieza a ser del +7%. Para los radares Pegasus, el margen está fijado en un +10%.

Lo que muchos no saben es que estos márgenes hay que aplicarlos a partir de +1 kilómetro/hora del límite de velocidad de la vía por la que circulamos. Es decir, que en una zona limitada a 90 kilómetros/hora, un radar fijo o cualquier otro de tipo estático saltaría a partir de los 96 kilómetros/hora, mientras que uno móvil lo haría a partir de 98 kilómetros/hora.

Si lo aplicamos a la velocidad máxima en autovía, el dispositivo fijo saltará a 126 kilómetros por hora y el móvil a 128 kilómetros/hora. Este margen del 5 y 7% hace que, a mayor velocidad, menos restrictiva sea la norma.

Por ejemplo, si circulamos a 160 kilómetros/hora, el margen de error hará que la sanción que se cumpla sea la de circular a hasta 150 kilómetros/hora, con la consiguiente sanción de 100 euros sin retirada de puntos. De otro modo, habría que asumir una sanción de 300 euros y la retirada de dos puntos, como establece en su tabla la DGT por sanciones entre los 151 y los 170 kilómetros/hora, una vez aplicado el margen.

⏩Resultados campaña #velocidad, del 17 al 23 de abril.

✅Se controlaron casi 800.000 en más de 2.800 puntos de control
❌Denunciados más de 45.000 conductores, el 57% en #CtraConvencional
1️⃣1️⃣conductores, excedían en✖️80 km/h la velocidad permitida

👉https://t.co/aN6tvUdlxH pic.twitter.com/tspMLUft9h

— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) May 5, 2023

Este margen también puede hacer que te libres de cometer un delito, ya que el exceso de velocidad pasa de sanción administrativa a acto delictivo si se supera en más de 60 kilómetros/hora el límite de una vía urbana, mientras que en interurbanas sucede cuando se excede el límite marcado en más de 80 kilómetros.

Si nos pilla un radar fijo o estático en autovía limitada a 120 kilómetros/hora, el delito sería circular a 212 kilómetros/hora, pues tras aplicar el margen de error nos quedaría una velocidad de 201 kilómetros/hora.