Asegurar un coche en 2023 te puede costar un 30% más que el año pasado

Los años 2016 y 2017 estuvieron marcados por una caída progresiva en el precio del seguro del automóvil, que se ha mantenido hasta hace unos meses por debajo de la barrera de los 600 euros de media. Sin embargo, 2022 rompió con esta racha a la baja y cerró la temporada con un coste medio trimestral de 655,9 euros, frente los 560,7 euros que costó durante los últimos tres meses de 2021.

Es decir, que empezamos el año 2023 con un incremento de más del 15% y tanto expertos, comparadores y responsables de las aseguradores han avisado de que este servicio seguirá subiendo. Se ha visto en los datos extraídos por el comparador Kelisto.es del pasado mes de marzo, que arrojan que este tipo de pólizas ha elevado su precio un 21% de media en los últimos doce meses.

Mientras que el seguro a terceros ha incrementado de 340 a 381 euros, las pólizas a todo riesgo han pasado de 1.570 euros a 1.995 euros anuales, y en marzo estas últimas ya superaban los 2.250 euros. Lo que implica que ya puede costar un 30% más asegurar un coche con las mismas ventajas que hace un año.

Atendiendo a la inflación, se puede argumentar que todos los gastos en general han subido y, por tanto, el de servicios como el seguro de automóvil. Pero conviene tener en cuenta que si el IPC o Índice de Precios de Consumo en general registró una cifra positiva del 5,7%, vemos que es una cifra inferior al 8% de media que subieron las pólizas de coches en todo 2022 con respecto a 2021 y mucho menor si la comparamos con el 15% de más que se pagó en diciembre, con respecto al mismo mes del año anterior.

Meses atrás queda la guerra de precios que se había producido entre las aseguradores, con cuotas anuales incluso por debajo de mercado para arrancar clientes de donde fuera y mientras los estragos de la pandemia seguían haciendo mella en la ventas y matriculaciones de coches nuevos. De hecho, las primas habían descendido un 0,9% en 2021, según ICEA o Investigación Cooperativa entre Entidades Aseguradoras, fruto del confinamiento entre marzo y junio del año anterior, de las restricciones de movilidad que duraron unos cuantos meses más y de un consecuente descenso de la siniestralidad.

Ahora que el mercado sigue reflotando, suben los precios para un servicio del que dispone casi el 80% de las familias españolas. De hecho es el más contratado en nuestro país, con un predominio del seguro a terceros con ampliación, seguido del seguro a terceros y del denominado 'a todo riesgo'.

La subida se estima en un total de 677,5 millones de euros extra para que los conductores tengan sus coches igual de protegidos, con la misma cobertura/póliza, que el año pasado. Y este dinero saldrá del bolsillo de los consumidores, bien con la llegada de nuevos contratos por compra de vehículo nuevo o por la subida de unas primas que serán revisadas por parte del 75% de las aseguradores que trabajan en España. Según Antonio Huertas, presidente de Mapfre, esta medida afectará, para bien o para mal, a más de la mitad de los clientes.

Que en 2022 los desplazamientos aumentaran un 3% con respecto a 2019, cifrados en 439,8 movimientos por carretera según la Dirección General de Tráfico, también implica, por desgracia, más siniestros, más asistencia en carretera y, como viene siendo habitual, subida en las pólizas. Y es que todo lo anterior también está afectado por la subida de materiales como la pintura, las piezas y la mano de obra de los talleres, así como del resto de costes y profesionales relacionados con el sector.

Con las cifras de la Unión Española de Entidades Asegurados y Reasuguradoras o Unespa sobre la mesa, en 2022 se superó el número de averías y siniestros si lo comparamos con el año previo. Detrás de esto, por supuesto está el estado actual de las carreteras y el hecho de que el parque automovilístico sigue envejeciendo y vaya ya por un media de 13,5 años, según cifras del año pasado y con dos terceras partes de la flota por encima de los 10 años de antigüedad.

Tener un coche más viejo, también hace al contratante optar por seguros más básicos, más económicos y con menos coberturas, dejando los seguros a todo riesgo principalmente para coches nuevos. De ahí que los ingresos de las aseguradoras también hayan caído y se quieran contrarrestar estos ingresos a la baja.

Si echamos la vista hacia atrás, en 2019 la antigüedad del parque de automóviles era de 12,7 años de media y de 9,2 años en el año 2010. Precisamente, el coste medio de las pólizas de seguros en 2010 era de 400 euros, según un informe de Rastreator.