Williams apuesta por la fabricación de baterías

Williams Grand Prix Holdings, la matriz de Williams Motor Racing, ha dado luz verde a convertirse en fabricante de baterías destinadas a coches híbridos y eléctricos. Lo hará a través de su subsidiaria Williams Advanced Engineering y de la mano de Unipart, un gigante del mundo de los recambios de automoción –y en su día generoso patrocinador incluso de F1– y ya tiene su primer gran cliente: Aston Martin.

El futuro Aston Martin Rapide tendrá baterías fabricadas por Williams, aunque inicialmente podría recurrir a baterías suministradas por Tesla. Pero también está en marcha la colaboración con el grupo Tata, es decir con las marcas Jaguar y Land Rover. El objetivo es construir 10.000 grupos propulsores eléctricos y sus correspondientes packs de baterías.

Williams tiene gran experiencia en baterías de alto rendimiento y sistemas de almacenamiento de energía. Suyo es el sistema 'flywheel', que almacena energía eléctrica en un volante de inercia, lo usa el Porsche 911 Hybrid ganador de las 24 horas de Nürburgring y por los primeros Audi LMP1 híbridos que ganaron Le Mans.

© Williams

Y, sobre todo, suyas son las baterías que la Fórmula E ha utilizado en sus primeras cuatro temporadas, pero el paso de ahora es más ambicioso: busca ser fabricante en gran serie de baterías, no limitarse a un centenar de packs como era el caso de la Fórmula E, es decir una fabricación artesanal casi a la unidad, aunque con gran contenido tecnológico.

El lugar seleccionado para la fabricación es una antigua factoría en la que se habían construido los Riley, en Coventry. La marca despareció hace medio siglo, pero las instalaciones siguieron funcionando para Unipart.

El paso dado por Williams no debe sorprender. Son muchos los equipos de F1 que, con sus medios tecnológicos, afrontan proyectos para terceros al margen de la F1. 

Williams en su día colaboró con el Renault Clio Williams y sobre todo realizó el espectacular Jaguar C-X75. También tuvo que ver con el BMW prototipo que ganó las 24 horas de Le Mans y el sistema 'flywheel' se ha reciclado como recuperador de energía para vehículos pesados.

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