Ferrari y las quinielas para sustituir a Camilleri

Unas quinielas en las que han sonado nombres como el de Jean Todt, el presidente de la FIA, que no se presentará a la reelección; a su favor, el hecho de ser director del equipo Ferrari en sus años más brillantes, la era Schumacher, y que posteriormente ya ocupó el cargo de administrador delegado de Ferrari… aunque en su contra están sus 74 años.

También el nombre de Stefano Domenicali, el que fue jefe de equipo de Ferrari y que después ha tenido un papel relevante en el grupo Volkswagen y al frente de Lamborghini como director ejecutivo y artífice de un gran impulso de la marca, pero que el 1 de enero será el sustituto de Chase Casey en Liberty Media y se convertirá en el CEO de la F1.

Pero estos nombres parecen poco realistas. Corresponden al deseo expresado por John Elkann de que el administrador delegado nuevo tenga cierta sensibilidad por las carreras… y a que parece descartada una búsqueda interna.

La elección está en manos del Consejo de Administración de Ferrari, que debe reunirse esta semana, una convocatoria efectuada con anterioridad a la renuncia de Camilleri. Los componentes de éste son Elkann, el vicepresidente Piero Ferrari, Delphine Arnault, Francesca Bellettini, Roberto Cignoli, Eddy Cue, Sergio Duca, John Galantic, Maria Patrizia Grieco y Adam Keswick.

Curiosa composición porque priman nombres de la industria del lujo y la moda: Louis Vuitton –Delphine Arnault–, Chanel –Galantic, presidente además del AS Roma aunque la familia Agnelli es fanática de la Juve–, Yves St. Laurent –Francesca Bellettini– o los hoteles de lujo Mandarin Oriental –Keswick, que es además administrador de Ferrari NV, la sociedad matriz de Ferrari S.p.A.–. Duca es el administrador delegado de Tofaş Türk Otomobil, la fábrica turca de Fiat. Todos ellos son miembros, además, de diversos consejos de administración. Cignoli es el hombre de perfil más técnico y poseedor de varias patentes en ciencia de materiales, nanotecnología, semiconductores, etc.

En realidad, Camilleri era un administrador-puente. Su contrato era de tres años, hasta finales de julio de 2021 y desde el primer momento dijo que no tenía intención de renovarlo.

Elkann quiere alguien que conozca el sector y se avanzan los nombres de Michael Manley, el hombre que ha relanzado FCA y sobre todo ha dado alas a Jeep pero cuyo rol quedará diluido en la fusión con PSA, y de Davide Grasso, administrador delegado de Maserati y que, por tanto, conoce Maranello por las sinergias entre ambas marcas.

También suenan Vittorio Colao –de Vodafone y miembro del comité de sabios para la recuperación italiana–, Diego Piacentini y Luca Maestri, vicepresidente y director financiero de Apple.

Entre tanto, Mattia Binotto sigue teniendo la confianza de Elkann, pese a esta temporada desastrosa y en Ferrari deben tomar antes de final de enero la decisión de si completar el programa de F1 con el ataque a Le Mans, una vez descartada una vinculación con la IndyCar.