La semana que vivimos 'peligrosamente': confían en el futuro
Ya que Mattia Binotto, como responsable de Ferrari, dejó muy claro, tras la carrera celebrada en Rusia, que ya están muy centrados en el monoplaza de la próxima temporada y por tanto, cualquier evolución en el SF90 no superará el calado visto en la cita de Singapur. Seguidamente afirmaba que desde el Gran Premio de España "el rendimiento con alta carga aerodinámica y en curvas lentas había sido algo pobre", pero dado el trabajo completado, el progreso ha sido evidente y tratarán de que siga por ese camino. Al final, insistía en las sucesivas mejoras del coche, ya que son varios los apartados a pulir, por lo que concluía como cierre de esta manera: "No es solo la aerodinámica, aunque es cierto que allí localizamos algunas debilidades, pero creo que se basa en un buen entendimiento global del coche, en encontrar un punto medio entre el equilibrio y la configuración".
Aunque todavía queda tiempo para que se pueda ver de nuevo un motor Mercedes propulsando a un McLaren, Toto Wolff ha dejado muy claro que los motivos del acuerdo firmado entre ambas partes, sólo tiene razones puramente comerciales, igual que sucede, con el resto de las escuderías a las que surten sus propulsores. Es por ello que el austriaco comentaba: "Está claro que cuando hablamos de unidades de potencia, nuestros clientes escucharán cuál es nuestro parecer". Como conclusión, Wolff nada tiene que decir a los equipos implicados sobre sus otras prioridades, pues "la razón de los acuerdos no es la influencia, sólo tiene motivos comerciales para generar ingresos y beneficios en los cuatro equipos en los que vamos a estar representados", zanjaba el responsable de los de Brackley.
Mientras tanto, por Renault, ningún enfado por la pérdida de un cliente como McLaren, según comentaba Cyril Abiteboul, para seguidamente explicaba que en su momento están seguros que tendrán clientes de sobra para su propulsor, aunque precisaba: "No necesitamos sólo más equipos, sino también que estos tengan calidad y sostenibilidad en su proyecto". Sin embargo de no ser así, la marca del rombo puede perfectamente seguir adelante con el desarrollo de sus unidades de potencia y del resto del equipo, según aseguraba el francés. Y como punto final a lo declarado y puestos a soñar en una asociación casi idílica, Abiteboul confesaba: "Creo que lo visto entre Alfa Romeo y Ferrari es un buen ejemplo porque están compartiendo un mismo proyecto. Hay una combinación de marketing, de tecnologías y, por supuesto, también en el motor, en todo el conjunto de cosas".
Precisamente desde la formación suiza, hablaba su jefe de equipo con respecto a la alineación de pilotos que representarán al mismo el próximo año, para indicar que será en poco tiempo cuando confirmen ambos asientos. "Vamos a tomar la decisión muy pronto, pero honestamente, si echas un vistazo a las últimas carreras, creo que Antonio está haciendo un trabajo muy consistente y también ha estado igualando a Kimi en las últimas seis o siete clasificaciones", declaraba Frédéric Vasseur. Seguidamente el responsable de los de Alfa Romeo comentaba lo visto por tierras rusas con estas palabras a modo de ejemplo: "Estuvo al frente en Sochi. De acuerdo, la primera vuelta no nos fue bien, pero está haciendo un muy buen trabajo y mejorando cada día, paso a paso". Si a lo anterior sumamos que el piloto italiano pertenece a la estructura de Ferrari, desde luego parece que el 2020 no tiene visos de que necesite un cambio de aires.
Ya que Max Verstappen protagonizó un arranque exitoso, en el que adelantó a Lewis Hamilton y a Charles Leclerc en el GP de Japón, para luego tener un incidente, Helmut Marko comentaba al terminar la carrera: "Es irónico, fue la mejor salida de la temporada". Luego el austriaco explicaba que los daños en el monoplaza de Max eran tan importantes, que al perder tanta carga aerodinámica, no tenía sentido continuar, dado el pésimo comportamiento del coche. Evidentemente el recado por parte de Helmut para el piloto de Ferrari llegó poco después al decir: "Un error tan estúpido como éste no puede sucederle a un piloto de élite". Y para terminar, y ya que los comisarios se hicieron de rogar, el asesor de Red Bull cerraba su intervención así: "La penalización era clara, ya que Leclerc se hubiese ido fuera si no hubiera tenido a Verstappen como amortiguador. Desafortunadamente la sanción no nos ayuda en nada".
