Stroll se defiende: "El apoyo de Williams no se compra"
Lance Stroll debutará este año en la Fórmula 1, y su nombre –más bien su apellido– siempre ha ido ligado al del dinero. Lawrence Stroll, multimillonario padre del nuevo piloto de Williams, ha financiado toda la carrera de su hijo hasta verle sentado en uno de los asientos con más historia de la Fórmula 1. Pero tal y como apunta el joven canadiense, el dinero de su padre no lo es todo. Hace falta talento para triunfar.
"Obviamente, ha sido muy importante. Sin él, no hubiera sido posible llegar a la F1. Necesitas dos cosas para llegar arriba en el deporte: talento y dinero. Otros tienen patrocinadores, yo tengo a mi padre. Mucha gente de Canadá tiene mucho talento, pero les falta dinero para irse a Europa. Yo ahí necesitaba a mi padre, y él financió mi carrera. El dinero tiene que llegar de algún lado", aseguró el nuevo compañero de Felipe Massa en una entrevista a Auto Motor und Sport.
No se siente molesto por los comentarios que han surgido a su alrededor en relación a que puedan infravalorarle por el hecho de que Lawrence le haya proporcionado todas las facilidades de cara a pilotar un Fórmula 1: "Él (mi padre) afianzó todas las posibilidades, pero yo tenía que ponerlas en práctica. Mi padre no pilota el coche. Sin su dinero, yo no podría haber completado esta carrera, a menos de que hubiera encontrado un patrocinador. En este deporte, se ven muchos hijos de ricos que tienen las mismas posibilidades, pero que no han conseguido hacer nada. Yo hasta ahora he ganado todos los Campeonatos en los que he competido", afirmó.
En relación a unas declaraciones de Lewis Hamilton en las que afirmaba que los pilotos sin un trasfondo económico favorable tienen mayor ímpetu en las carreras, Lance cree que cuando te subes al coche, esos factores no influyen de ninguna forma: "No lo creo. Tú tienes la responsabilidad de ser más o menos rápido. Venir de un entorno rico no lo cambia, y yo no me autoimpongo presión. Siempre he querido ganar, con independencia de lo que hacía. Cuando estás dentro del coche y te atas el casco, no importa de dónde vengas. Ahí sólo cuenta el talento, el trabajo, las ganas y el ímpetu que quieras invertir a tu trayectoria", comentó.
Al ser preguntado por si su particular situación podría generarle una mayor presión, el joven piloto responde: "Al contrario que otros pilotos, yo podría haber ido a la Universidad, pero quería correr. Vengo de donde vengo, y eso no quiero cambiarlo. Mi padre es simplemente un gran aficionado al automovilismo. Sí, es rico y ha hecho todo lo posible, por lo cual le estoy muy agradecido, pero creo que yo he extraído siempre el máximo. También he tenido mis días duros: tuve que ganar el Campeonato de la Fórmula 3, y los puntos de la superlicencia o el apoyo de Williams tampoco es que pudiera comprarlos. No sólo ayuda el dinero", apuntó.
