Segunda Pole de Rosberg con susto tras un fuerte accidente de Kvyat
Otra vez la misma sensación. Ojos pegados a la pantalla, corazón en un puño, respiración cortada… Por suerte, esta vez no hubo nada que lamentar. Oír la voz tranquilizadora de Kvyat fue como escuchar la de tu propia madre en medio de una pesadilla horrible. Parece que el caprichoso destino nos quiere dar un susto cada vez que el Mundial pise Japón. Los recuerdos se vienen a la mente rápida e inevitablemente...
La clasificación concluyó así, de manera abrupta, con un golpe tremendo de Daniil contra las protecciones de la curva 10, justo antes de llegar a 'Hairpin'. El ruso pisó el cespéd y el RB11 se descontroló como un toro de rodeo. Indomable. Rápidamente las piezas de fibra de carbono comenzaron a volar en medio de una polvareda hasta que se vio la imagen de un Red Bull completamente destrozado. Bandera roja, sesión finalizada a falta de 30 segundos y alivio…
Tendría todavía la preocupación encima por la salud de su compañero de asfalto, pero seguro que Rosberg también sintió un alivio parecido. Las 76 milésimas que sacó a Hamilton en el primer intento de la Q3 hacían presagiar otra derrota del alemán un sábado, y más al ver que Lewis tuvo un pequeño fallo en una pasada de frenada. Pero, con la vuelta buena abortada de los todos los contendientes de la Q3, Nico se aseguraba la Pole, su segunda de la temporada.
Y es que Suzuka vio como Mercedes despertaba de su pesadilla. En Singapur se les vio febriles, con dolor de cabeza y sin parar de toser. Pero aquí se han quitado el constipado de encima y vuelven a ser los de siempre. Nada mejor que una buena ración de curvas rápidas y de largas rectas para correr más que nadie. Inalcanzables hoy, se antoja difícil que la situación cambie mañana. Así, Rosberg tendrá que ganar el duelo a Hamilton si quiere seguir acercándose.
En la sexta plaza llega Ricciardo, que no se quedó tan lejos de Kimi, a algo más de una décima. El australiano compartirá fila mañana con un notable Grosjean, que, al menos en la pista, suele ser el que lleva las buenas noticias a Lotus. Sergio Pérez y Kvyat fueron los dos que terminaron de completar las diez primeras posiciones, ambos sin tiempos en sus registros por la misma razón: el accidente ya comentado del ruso.
Los que se quedaron sin Q3 fueron los españoles. Al que se esperaba en ella, Sainz, no pudo lograr un tiempo para pasar el corte por unas raras vibraciones en un juego recién estrenado de neumáticos medios. Tenía ritmo de Top 10. Y al que no se esperaba, Alonso, cumplió las predicciones y volvió a quedarse en la Q2. En Japón, el MP4-30 tampoco tiene lo necesario para llegar a cotas elevadas. Será difícil que la afición nipona tenga algo que celebrar.
Al menos, Carlos y Fernando tuvieron más suerte que sus vecinos de box. Porque a Verstappen se le paró el STR10 en medio de la pista en la Q1 y a Button le afectó la bandera amarilla que provocó el holandés, como a tantos otros, y no tuvo un segundo intento para mejorar. Es la primera vez que Jenson no se clasifica en el Top 10 en Japón. Otra cosa que puede animar algo a los españoles es el puesto que ganan con la sanción que Hülkenberg arrastra desde Singapur.
Las últimas posiciones quedaron adjudicadas para Sauber y Manor. Los primeros vieron como Ericsson protagonizaba una rapidísima salida de pista en 'Spoon' al pisar la hierba, aunque el sueco y el C34 salieron indemnes por la gran escapatoria del lugar. Y los segundos, a Rossi quedarse fuera del 107%, al que también le afectó el incidente de Max. Mañana, nuevo madrugón para ver qué nos depara la carrera. Esperemos que no más sustos. Por favor.
