GP de Baréin F1 2019

Williams no podrá tocar los pianos en Sakhir; no tienen recambios

28/03/2019 18:18

El equipo Williams no podrá arriesgarse a la mínima rotura durante el fin de semana del GP de Baréin, dado que apenas tienen piezas de recambio para partes del coche como alerones o el suelo, por lo que sus pilotos deberán alejarse de los pianos de Sakhir para minimizar riesgos. Sin embargo, George Russell ve "luz al final del túnel" aunque señala que se necesita tiempo para volver a donde pertenecen.

El actual campeón de la Fórmula 2 –campeonato que dará comienzo este fin de semana en Baréin– es optimista respecto al monoplaza que han diseñado en Grove, pero no espera que la situación dé un giro de 180 grados de la noche a la mañana.

"Nuestro paquete, en general, es probablemente mejor de lo que estamos mostrando en este momento. Probablemente tengamos un par de décimas por delante. Entonces, si aprovechamos al máximo lo que tenemos, iremos hacia delante. Ciertamente hay luz al final del túnel", comenta Russell, en declaraciones recogidas por el portal web oficial de la F1.

"Pero ese túnel está bastante lejos y no debemos hacer nada drástico porque al final del día, incluso si eres uno de los tres mejores equipos, no puedes superar tu tiempo de vuelta en un día, una semana o un mes. Es un proceso, el equipo dejó claro desde finales del año pasado que es un proyecto a largo plazo para ellos y que no están buscando nada a corto plazo".

Por su parte, Robert Kubica, compañero de Russell en la presente temporada, se lamenta de los pocos repuestos que maneja Williams en estos momentos: cualquier fallo con daños significa agotar las piezas del equipo. No obstante, el polaco también es optimista de cara al futuro y aplaude el trabajo en la fábrica.

"Llegar a un nuevo fin de semana no es una situación fácil desde el punto de vista del piloto porque estaremos limitados con las piezas de repuesto. Mirando lo que me pasó en Australia el viernes en Libres 1, cuando cogí el piano y dañé el fondo plano, no teníamos piezas de reemplazo y eso afectó probablemente todo el fin de semana".

"Es poner al piloto en una posición difícil. Es como si no pudiera pasar por las curvas o por los pianos por el riesgo de que el coche se rompa y no tengamos piezas para sustituirlas. Ya es duro que nos falte rendimiento y estamos agregando otro factor que complica nuestras vidas. Pero sé que en la fábrica todo el mundo está trabajando duro, así que sólo necesitamos un poco más de tiempo para arreglarlo", expresa el polaco para concluir.