Cree que la F1 puede haberse equivocado con el reglamento de 2017

Mosley pide "menos aerodinámica y más agarre mecánico"

Santi Torres
06/02/2017 12:15

Max Mosley abandonó el cargo de presidente de la FIA tras un polémico encuentro sexual sacado a la luz. Mosley cayó, Jean Todt entró como sustituto. Ese cargo que ocupó Mosley le da una visión privilegiada de los tejemanejes que hay en la trastienda del paddock. Para el abogado británico, la nueva normativa es perjudicial para la F1. 

Hace 11 años que los motores V8 de 2'4 litros fueron introducidos, y 10 desde que desaparecieron definitivamente los motores V10. Esa reducción de cubicaje y cambio en la arquitectura del motor fue obra de Mosley, quien ante todo se vio obligado a adoptar medidas de seguridad drásticas: pese a ocurrir en 1994, el trauma de la muerte de Roland Ratzenberger y Ayrton Senna seguía presente. Y, en la actualidad, Mosley sigue siendo reticente a las altas velocidades. 

"Mi opinión es que la F1 puede haber tomado el camino equivocado. Yo hubiese optado por aún menos aerodinámica y quizá más tracción mecánica", comenta a la cadena británica ITV. "Hacer que los monoplazas sean más rápidos va en contra de la normativa que la FIA ha ido implementando en los últimos 50 años, que trataba de hacer los coches más lentos. O seguros, dependiendo cómo lo mires. Y es que la velocidad es sinónimo de peligro, obviamente". 

No sólo Mosley fue el líder de la FIA tras el periodo del polémico Jean-Marie Ballestre, sino también fue el encargado de vender la F1 a la FOM bajo un contrato de 100 años. Amigo íntimo de Ecclestone, Mosley cree que Liberty Media tendrá dificultades para llevar bien el negocio que es la F1. 

"Es difícil de pronosticar. Puede que sean hombres de negocios brillantes y que lo tengan todo pensado. Por otra banda, quizá todo sea más difícil de lo que pensaron", continúa Mosley. "Siempre imagino qué sucedería si alguien me pusiese al mando de las varreras de caballos y me dijese: 'tienes que solucionar lo que ocurre'. Siempre parece más fácil desde fuera. Ves todo lo que hacen y crees que lo hacen mal. Entonces es cuando te pones a ver todos los documentos y todo lo que se cuece y ves lo que ocurre realmente". 

Con este mismo argumento, Mosley defiende la importancia de Ross Brawn. El exingeniero británico es un hombre que conoce la F1, y por eso Mosley lo ve como pieza fundamental en la nueva etapa del Gran Circo. 

"Ross entiende el deporte y entiende las necesidades que la F1 tiene. Tiene un cerebro prodigioso a nivel analítico. Será una persona importante para ellos en ese sentido y el aspecto deportivo no es algo que debería ser liderado por Liberty. Creo que han hecho una buena elección, pues Ross es impresionante", concluye.