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El asiento de Alonso se partió en el accidente de Australia

Miguel Carricas
28/03/2016 17:18

Fernando Alonso sufrió la rotura de su asiento cuando sufrió el violento accidente del Gran Premio de Australia, según informa Motorsport. Jürgen Lindenmann, médico de la FIA, ha reconocido que la magnitud del accidente del piloto asturiano estuvo "cerca" de causarle un daño importante para su integridad física. El asturiano confesó que "tuvo un poco de dolor" al bajarse del monoplaza y durante las horas posteriores a la carrera, pero insistió en que su preparación para el próximo Gran Premio de Baréin no se vería afectada de ninguna forma.

Pese a que Alonso saliera ileso del cockpit y contemplara atónito cómo las graves averías de su monoplaza no le causaron ninguna lesión, Lindenmann ha alertado sobre la gravedad de su incidente. "Cuando un piloto experimentado como Alonso se ve en las imágenes volando por los aires y saliendo ileso, puede decirse a sí mismo: 'este coche es el vehículo más seguro posible'. Sin embargo, no olvidemos una cosa: tuvo suerte. Se salvó por poco", explica en declaraciones a Der Spiegel.

Estos chicos tienen cuerpos muy entrenados y muy elásticos, pueden encajar bien algo así

Las secuelas más profundas para Alonso se limitaron a un dolor de costillas y un vendaje en la rodilla derecha. En cualquier caso, Lindenmann insiste en que su buena preparación física no debería causarse mayores molestias hasta Baréin. "Yo no estaba presente pero seguro que le dolían los músculos y los huesos. Eso tarda una semana y al final se acaba. Estos chicos tienen cuerpos muy entrenados y muy elásticos. Pueden encajar bien algo así", revela.

Ya en el plano mental, el médico alemán no descarta que el "estrés" del accidente puede llegar a afectar al ovetense. "Algunos no pueden dormir o se despiertan bañados en sudor. Un accidente grave provoca un estrés impresionante, el corredor lo vive como si ocurriese a cámara lenta", indica Lindenmann, quien insiste, sin embargo, en que "le asombra la forma" en la que los pilotos "superan" psicológicamente este tipo de accidentes.