Bottas 'salva' la batería y centralita que cambió en Australia

Este año la fiabilidad ha entrado en unos niveles muy reseñables, ya que la reducción de las unidades –a sólo dos MGU-K, baterías y centralitas y de tres en motor de combustión interna, turbo y MGU-H– hacen que haya un margen de error prácticamente nulo y que cualquier problema o avería vayan a causar que los equipos se vean en una situación muy comprometida para el resto de la temporada. 

En este sentido, en Mercedes pueden respirar un poco más tranquilos, y es que tras el accidente de Bottas en la sesión de clasificación de Melbourne tuvieron que que reemplazar la batería y la centralita, y se habían quedado en el monoplaza número 77 con un sólo componente para el resto de la temporada de dichos dos compuestos de la unidad de potencia. 

Eventualmente, ésta situación no será tan grave, ya que el equipo Mercedes fue capaz de llevar a cabo un test en los entrenamientos libres del viernes del GP de Baréin para estos dos componentes y pudieron ver que se encontraban en un buen estado. Así, pudieron devolverlos a la estantería de piezas disponibles y haciendo que a pesar de que se encuentren en segunda y última unidad de la temporada, la primera siga estando activa para el resto de la temporada. 

Un motivo más de alivio para Mercedes. No tanto en la batería, ya que se ha demostrado que es capaz de aguantar más de diez carreras sin ningún tipo de problema. Sino en la centralita, un componente que llegó a causar algunos problemas la pasada campaña. Así pues, veremos cómo se manejan en las próximas carreras, si finalmente consiguen neutralizar éste problema y si no les afecta demasiado a su rendimiento en pista.

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