Llamadle 'Max Moisés'

Por supuesto, esta victoria no significa el título, todavía. Quedan nueve carreras y Horner –al más puro estilo Wolff– ya ha advertido que las próximas dos carreras serán favorables a Mercedes, pero confirma que la pelea será dura hasta el final.

Pocos dudaban de que Max llegará a campeón del mundo. La pregunta no era si llegaría, sino cuándo se proclamaría campeón. Una cosa es ser capaz de ganar carreras y otra la de ser campeón. Y en Zandvoort, ante los suyos, Max superó con máxima nota la última asignatura.

El de Países Bajos corrió de forma inteligente, demostrando gran madurez. No se dejó llevar por la presión de correr ante los suyos. Aunque otros circuitos ya han tenido gradas naranjas, no es lo mismo correr en casa. Pero, sobre todo, demostró que lo sucedido en los dos Grandes Premios anteriores, en los que los Mercedes lo eliminaron –Lewis, en un caso; Bottas en otro– no le ha afectado, es algo olvidado del pasado.

Se mantuvo siempre tranquilo, concentrado, pensando el pilotar, leyendo bien la carrera, midiendo la degradación de las gomas y respondiendo a cada movimiento de Lewis de forma inmediata.

Incluso cuando llegó el momento de los doblajes, mostró una eficacia tal que Hamilton llegó a decir que a partir de ahora debían llamarle 'Max Moisés' porque los adversarios parecía que se adaptaban a su paso… aunque seguro que Verstappen querrá desmentirle pisando la tierra prometida: el título.

Tras la clasificación pudo parece que Hamilton estaba en posición de poner en aprietos en Max. Pero había una pequeña diferencia, para nada baladí: Max no logró juntar sus mejores parciales en la misma vuelta. Lewis, sí. Si sumamos los mejores parciales, Max le hubiera sacado al menos 150 milésimas a su rival.

Lewis estuvo cerca, en algún momento incluso pareció que podía presionarlo de verdad, pero en realidad no podía presionarlo, todo lo más seguirle. Esta vez Lewis seguro que ha tomado nota: ya sabe –como lo supo un día Michael Schumacher con Fernando Alonso– que Max será el hombre que pondrá fin a su dictatorial reinado y que puede hacerlo pronto.

Fernando dijo en su día que quería ganar el título con Michael en pista "porque si es con él ya retirado, no valdrá lo mismo" y seguro que Max está de acuerdo con el asturiano, aunque en su caso el rival sea Hamilton. Lo de llamarle 'Max Moisés' es a la vez un cumplido y un reconocimiento de, al menos en este Gran Premio, su impotencia.