Se prevé una caída de hasta el 45% en las matriculaciones para este año

El descenso de las matriculaciones de coches causado por la crisis del coronavirus va a tener su efecto en las cifras globales del año, de las cuales ya se han hecho las primeras previsiones. Según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones –Anfac– y la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción –Faconauto– se van a alcanzar en 2020 alrededor de 700.000 unidades, lo que significará un descenso de entre el 40% y el 45%. Cabe recordar que en 2019 se matricularon 1,25 millones de turismos.

La pandemia de coronavirus ha provocado el cierre tanto de las fábricas de coches como de los concesionarios, lo que ha hecho que las previsiones anteriores para este año queden anticuadas. Para llevar a cabo el nuevo cálculo se ha tenido en cuenta un estado de alarma de dos meses de duración y que se cumpla la desescalada prevista, que en teoría debería finalizar en los últimos compases de junio. También se ha considerado una caída del PIB de entre el 5% y el 6%.

Ambas entidades consideran además que el primer semestre tras la finalización del estado de alarma va a ser duro en cuanto a las ventas debido a la incertidumbre económica que va a dejar la pandemia. No obstante, se espera que pasado el verano haya una progresiva recuperación que, no obstante, situará los números cerca de lo vivido hace prácticamente una década con la crisis económica.

"Es imprescindible tener en cuenta la situación de especial debilidad en la que se encuentra el sector de la automoción, uno de los pilares de la economía y el único sector industrial que lleva parado en seco más de un mes", ha dicho el director general de Anfac, José López-Tafall, en declaraciones recogidas por Europa Press.

Por su parte, la vicepresidenta ejecutiva de Faconauto, Marta Blázquez, se ha expresado en los siguientes términos: "No podemos permitirnos estas previsiones, porque somos un pilar básico de la economía y del tejido empresarial. No olvidemos que, en todas las comunidades autónomas y provincias, la actividad de los concesionarios tiene un peso determinante en su economía y en generación de empleo".