Pirelli avisa: "El asfalto de Austin sigue bastante bacheado, podría ser una causa de sobrecalentamiento"

Vuelve Austin y vuelve la Fórmula 1 a Estados Unidos. Después de no pisar el continente americano desde el pasado Gran Premio de Canadá disputado en junio, ahora llega el turno de la 18º ronda del campeonato que, además, cuenta con formato 'Sprint'.

La elección de neumáticos para este fin de semana es la misma que la del año pasado: C2, C3 y C4. Según explica Mario Isola, las cargas que deberán soportar las gomas serán más bien laterales. De todos modos, si puede haber un problema, ése será el posible sobrecalentamiento que podrían sufrir las ruedas como consecuencia de los baches de la pista.

Por otro lado, recuerda que la meteorología en Texas es bastante cambiante, por lo que los equipos no podrán despegar la vista del radar ni un solo minuto, pues el panorama aquí puede alterarse de un momento para otro.

"Las fuerzas que actúan sobre los neumáticos en COTA son principalmente laterales y están bastante bien equilibradas entre las ruedas delanteras y traseras, sin que ninguna de éstas esté sometida a una tensión especial. También es importante tener buena tracción en las curvas lentas. El asfalto sigue bastante bacheado, a pesar de la repavimentación parcial que se realizó el año pasado. Esto puede provocar que el neumático se deslice muy ligeramente, lo que podría ser una posible causa de sobrecalentamiento", ha compartido el italiano.

"La degradación observada en Austin es principalmente térmica, mientras que el 'graining' es algo bastante raro. La carrera siempre se ha celebrado en otoño: una época del año en la que el tiempo puede ser muy cambiante, incluso en un lapso de tiempo muy corto. No sería extraño ver días soleados y lluviosos alternativamente, con una amplia gama de temperaturas", ha añadido Mario Isola.

Los problemas de bacheado del trazado no es ninguna novedad en Austin. Si bien se ha llevado a cabo un reasfalte en los últimos meses, lo cierto es que la incomodidad y la peligrosidad que supone pilotar cualquier vehículo sobre una superficie tan irregular, es algo que ha hecho alzar la voz de los pilotos.

Quizá para la Fórmula 1 no sea un inconveniente tan perjudicial. Pero para la MotoGP, que también celebra en COTA su Gran Premio de Estados Unidos, es un problema que debe resolverse lo antes posible ya que se han visto situaciones muy cercanas al desastre.