Pirelli redefine la temperatura de funcionamiento de sus neumáticos

La ventana de funcionamiento de los compuestos de 2017 era de 30 grados, aproximadamente. La opción más cálida era la dura, que rendía a su nivel óptimo entre 115 y 145 grados. La más fría era la ultrablanda, que funcionaba entre 85 y 115 grados.

¿Qué ocurrirá en 2018? Que ese margen de 30 grados se ampliará para facilitar la vida a todos los equipos. No solo eso, sino que todos los compuestos presentarán un rendimiento más predecible.

"Antes un compuesto funcionaba a altas temperaturas, el siguiente lo hacía a bajas  temperaturas, el otro a altas… La idea es que en 2018 la temperatura sea decreciente entre el compuesto medio y el hiperblando", explica Mario Isola preguntado por SoyMotor.com.

"Hemos redefinido por completo las temperaturas. Cuanto más blando sea el neumático, más baja será su temperatura de funcionamiento. Lo mismo al revés. Eso debería contribuir a que los neumáticos sean más fáciles de comprender y usar".

El sobrecalentamiento es un fenómeno "inevitable", pero Pirelli está convencida de que puede controlar sus consecuencias.

"El sobrecalentamiento es inevitable. Los coches actuales dependen mucho de la aerodinámica. Cuando siguen a otro coche, pierden aerodinámica, derrapan y las gomas se sobrecalientan", relata.

"Lo que hemos hecho con estos nuevos neumáticos es diseñar unos compuestos que sean menos propensos al sobrecalentamiento, unos neumáticos que pierdan menos rendimiento cuando se sobrecalientan. Como es inevitable, has de encontrar una temperatura de funcionamiento más amplia para que la goma no pierda prestaciones cuando esté más caliente".

Pirelli ya ha confirmado que sus compuestos serán más blandos que los del último Mundial, un cambio de filosofía con el que buscan obtener más degradación para que las carreras se resuelvan con dos paradas en boxes.

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