Mario Isola: De los circuitos al volante de ambulancias

Este trabajo fuera de las cámaras lo realiza con total voluntariedad. Lleva más de 30 años poniéndose al servicio de la población milanesa a través de esta acción. Es el encargado de conducir el vehículo médico, acompañado de cuatro doctores, la persona a la que presta sus servicios y los familiares del auxiliado. 

"He desarrollado esta pasión en los últimos años. Cuanto más he estado en la ambulancia, más me he dado cuenta de que necesitas tener unas características especiales para este trabajo. Es realmente importante conducir con mucha fluidez porque, de lo contrario, el paciente podría verse dañado", ha explicado Isola en declaraciones que recoge el portal alemán Motorsport Total.

A pesar de ser un hombre de competición, Isola se atiene a las normas de tráfico de la misma forma que un conductor normal respetando al máximo la ley establecida y a pesar de que sea un conductor de ambulancia. 

"Si matas a alguien porque has ignorado los semáforos, estás a cargo de ese accidente aunque se trate de una emergencia. De todas formas, tengo que ir rápido en estas situaciones", ha relatado el italiano.

En lo que respecta a su trayectoria en las carreras, Mario Isola tiene una amplia experiencia en el automovilismo internacional. Llegó a competir en karting durante 11 años, donde se vio las caras con pilotos como Max Papis o Christian Pescatori. Dejó la competición para estudiar Ingeniería. Tras finalizar los estudios, fue contratado por Pirelli para trabajar en diferentes competiciones automovilísticas hasta recalar en la Fórmula 1.

Dado su conocimiento de la profesión, Isola se encarga de desarrollar un curso para todos aquellos que quieren ser conductores de ambulancia en la región de Lombardía. Un total de 5.000 personas se han dado cita en un curso que tiene a más de 100 profesores. 

"Las personas con un trabajo normal viajan en ambulancia aproximadamente una vez por semana. El noventa por ciento de los conductores son voluntarios y comenzamos las clases a las siete de la tarde. Y terminamos el turno a las cinco de la mañana, por lo que hay el tiempo suficiente para darte una ducha e ir a trabajar", ha finalizado. 

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