Los abogados de Ecclestone interrogarán a Gribkowsky en julio

Con motivo de la celebración del juicio que envuelve el denominado ‘Caso Gribkowsky’, y que arrancó la pasada semana en Múnich, Gribkowsky aseguró en que Ecclestone facilitó con una cantidad de cerca de 32 millones de euros (44 millones de dólares), con el fin de mantener su puesto de responsabilidad dentro de la categoría reina.

La acusación hacia el magnate británico podría derivar en un envío inmediato a la cárcel por una duración de diez años en el caso que su defensa no logre rebatir las pruebas ofrecidas por los abogados de Gribkowsky, en las que se confirmaría el beneficio económico aportado para formalizar la venta legal de la máxima competición.

Sin embargo, los abogados del jefe ejecutivo de la Fórmula 1 deberán esperar hasta el 30 de julio para poder rebatir su imputación después de que su intento por emprender la acusación hacia Gribkowsky el pasado Miércoles se viera interrumpido por el escaso tiempo disponible que marcaba la duración del juicio.

“Ahora, el equipo de defensa está en la feliz posición de tener 16 minutos para hacer preguntas antes de la pausa para almorzar”, ha revelado el juez Peter Noll.

Según los fiscales, Ecclestone no hubiera proseguido su actividad en la categoría bajo la posesión legal de cualquier otra compañía que no fuera CVC, por lo que la única oportunidad de conservar su mandato habría recaído en un cuantioso soborno al banquero germano.

En este sentido, Ecclestone admitió haber facilitado una cantidad multimillonaria a Gribkowsky, si bien éste habría amenazado con hacer falsas acusaciones sobre la situación financiera del británico tras incumplir su discreción en torno a la transacción de derechos.

Ecclestone y Gribwosky se disputaron "el control de la F1"

Uno de los testimonios más relevantes que contiene el caso es el de Tom Bower, quien escribió en el año 2011 una biografía sobre el camino de Bernie Ecclestone hacia el poder absoluto en la Fórmula 1.

Bower reveló en el juicio de Múnich los intentos de Gribkowsky de buscar un sucesor inmediato para Ecclestone, a quien ya había comunicado su intención de apartarle de la máxima responsabilidad del Gran Circo.

De hecho, la prensa alemana apunta a la posibilidad de que Bower afirmara que el británico y Gribkowsky libraron “una batalla por el control de la Fórmula 1”. 

“Veremos lo que pasa si sigues así”, citó Bower a Ecclestone en respuesta a Gribkowsky, quien interpretó tales palabras como una verdadera amenaza.