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Desde la pretemporada, quedó claro que la nueva era de McLaren-Honda iba a tardar en arrancar. Los éxitos presagiados necesitaban tiempo, ya que era necesario poner todo a punto y entender perfectamente el potencial de la nueva máquina que los de Woking tenían entre manos. Sin embargo, con el paso de las carreras, esos éxitos parecen aún más lejanos que al principio y pocas personas confían en que lleguen a medio plazo. 

Más de 215.000 personas de 194 países diferentes han participado en la encuesta que lanzó la GPDA con el objetivo de conocer las propuestas de la afición para mejorar la Fórmula 1 actual. El hecho de que exista un interés tan elevado por plasmar diferentes opiniones sobre los puntos fuertes y débiles de la categoría reina pone de manifiesto la necesidad de escuchar diferentes opiniones de gente relacionada con el deporte más allá de las fronteras del paddock, y es que los resultados de esta encuesta exigen al deporte de forma urgente un aumento del espectáculo con más coches en la parrilla, más libertad de desarrollo y menos trifulcas políticas en materia presupuestaria.

En un periodo de apenas 12 meses, Daniel Ricciardo ha pasado de ser el único piloto que era capaz de romper con la hegemonía de Mercedes en la batalla por las victorias a convertirse en un constante luchador por no caer en el ridículo de no superar en el corte de la Q2 con su RB11. Las sonrisas en el equipo Red Bull han dado paso a una profunda sensación de impotencia conforme Renault ha sido incapaz de solucionar los graves problemas de fiabilidad en su unidad de potencia, situación que el piloto australiano ve como una oportunidad de oro para abandonar los males de la mecánica francesa y recalar en Ferrari a partir del próximo año 2016.

El futuro de la Fórmula 1 tomará nuevas bases mañana tras la reunión que mantendrán los jefes de equipo en la que intentarán ofrecer propuestas para mejorar el espectáculo de este deporte. Unas propuestas que ya se trataron hace unos meses en una reunión con el Grupo de Estrategia, pero que intentarán matizar y mejorar para aplicarlo en el futuro.

El futuro de Kimi Räikkönen en Ferrari, y por extensión en la Fórmula 1, permanece incierto. El finlandés, quien ha asegurado que quiere seguir corriendo en la Scuderia y, que de no hacerlo, abandonaría la categoría, no tiene asegurado un asiento el año que viene, ya que su contrato acaba al finalizar esta temporada. Por ello, el que fuera campeón del mundo en el año 2007, ha asegurado que, hoy por hoy, la decisión final no está en sus manos.

Jolyon Palmer, tercer piloto del equipo Lotus durante esta temporada, ha expresado su deseo de convertirse en piloto titular en 2016. Palmer, quien se coronó campeón de la GP2 en 2014, está teniendo este año la oportunidad de subirse varias veces al monoplaza de Romain Grosjean, sustituyendo ocasionalmente al francés en los Libres 1 de algunos Grandes Premios.

Tras ocho carreras consumidas en el calendario de esta temporada, y a pesar de los rumores que le apartaban de la Fórmula 1 mucho antes, Roberto Merhi sigue siendo el inquilino del segundo asiento del equipo Manor, a pesar de que la escudería necesita a alguien que pueda aportar más dinero que el de Castellón. 

Kimi Räikkönen está en medio de una cruzada por mantener su asiento en la Fórmula 1. De lo contrario, el finlandés abandonaría la categoría a la que regresó en 2012. Por ahora los resultados no le acompañan, y eso no pasa desapercibido para la prensa ni para su jefe de equipo Maurizio Arrivabene. 

La 'silly season' en la Fórmula 1 para la temporada 2016 empieza elucubrar casi antes de lo previsto. Cuando ni siquiera se ha alcanzado el ecuador del Campeonato, desde Globo de Brasil sugirien que su novato piloto de Sauber, Felipe Nasr, podría estar al frente en la carrera por sustituir a Valtteri Bottas en Williams si éste finalmente acaba en el puesto que Kimi Räikkönen podría dejar libre en Ferrari. 

Cada vez que nuevas críticas arrecian sobre la situación actual de la Fórmula 1, surgen voces que claman por un cambio de rumbo de la categoría en un intento por recuperar una esencia que parece en gran parte perdida. Esos cambios, ahora, podrían estar más cerca que nunca de producirse, si se tienen en cuenta las declaraciones de algunos de los hombres más importantes del paddock, que han hecho suya esta necesidad de cambio inmediato.

Remi Taffin ha sido tajante y espera que Red Bull y Toro Rosso continúen con Renault de cara a 2016. En declaraciones al Salzburger Nachrichten, el ingeniero de Renault confía en la unión con los de Milton Keynes. "Estoy seguro que daremos motores a Red Bull y Toro Rosso en 2016", afirma. Cuando le preguntan sobre las evoluciones del motor, señala dos fechas clave: "A final de julio vendrá la primera evolución y tras el verano, otra".

Entre unas penalizaciones y otras, en McLaren acumulan para la carrera del GP de Austria hasta 50 posiciones de sanción, lo nunca visto. Si los fines de semana que han tenido hasta ahora les resultaron complicados, no se han enfrentado a ninguno con tan pocas aspiraciones a conseguir algo positivo como este. Este panorama desolador no es el mejor para recibir la visita de Takahiro Hachigo, el nuevo presidente de Honda.

Cuando Felipe Massa habla suele subir el pan, y esta vez no iba a ser menos. El brasileño se ha mostrado muy en desacuerdo con las opiniones de Kimi Raikkönen y Niki Lauda sobre la seguridad en la Fórmula 1. Los campeones del mundo aseguran que las carreras necesitan ser más peligrosas con el fin de hacerlas más interesantes para el aficionado, llegando incluso a asustar a los propios pilotos. 

Roberto Merhi afronta el Gran Premio de Austria con las esperanzas puestas en proseguir la evolución de su monoplaza y superar a Will Stevens en la carrera del domingo, objetivo que no fue capaz de cumplir en el Gran Premio de Canadá debido a una rotura en un palier, según ha revelado el piloto castellonense en declaraciones a la prensa española trasladada al circuito Red Bull Ring.

Kimi Räikkönen ha aseverado que, si no está en Ferrari el año que viene, no correrá en ningún otro equipo. Así lo ha explicado después de ser preguntado por su futuro y por los rumores que le sitúan fuera de la Scuderia en 2016. El finlandés también discutió con uno de los periodistas presentes, el cual había escrito sobre la posibilidad de que Räikkönen renovase con el equipo italiano a cambio de un salario más bajo.