Nani Roma se sincera: "Nunca había trabajado tanto en un proyecto como en este"

Han sido unas primeras etapas muy duras, que se han 'cargado' a muchos de los grandes favoritos, como es el caso de Carlos Sainz o Sébastien Loeb. Sorpresas no han faltado, menos aún tras la complicada –y extraña– etapa de 48 Horas, donde Nani Roma sufrió una rotura de motor en su Raptor T1+. Las cosas tampoco mejoraron mucho más ayer, cuando tuvo un accidente en la quinta etapa.

Así que era de esperar que el piloto catalán no llegase demasiado animado a esta jornada de descanso que ya se está produciendo este mismo viernes. Es consciente de que debe seguir en Arabia Saudí, pero las sensaciones ya no son las mismas de hace unos días, cuando estaba completamente motivado y preparado para el desafío de afrontar su 28º Dakar.

"Llevo 28 años en este negocio. Cuando lo conoces tanto sabes lo desagradecido que es a veces. Nunca había trabajado tanto en un proyecto como en este. Me habría gustado que las cosas hubieran ido un poco mejor, pero tampoco estamos aquí para quejarnos. La vida es así. Estamos aquí corriendo, con un buen coche, y sabíamos que el primer año era difícil", ha señalado en una entrevista en la que ha atendido a SoyMotor.com en el campamento de Ford.

"Me siento con la frustración de haber perdido una gran oportunidad, de no poder estar luchando por ganar carreras, que es lo que nos mueve. Pero el año que viene más y mejor", se ha puesto como objetivo, mirando ya hacia adelante, igual que hizo Carlos Sainz hace unos días, cuando regresó a España con la mirada puesta en 2026.

INICIO PROMETEDOR... Y FRUSTRANTE

La decepción por cómo han ido sucediendo las cosas es evidente. Para nada se había imaginado, antes de que arrancase la competición, que llegarían a hoy, viernes de descanso en Arabia, sin opciones, con una rotura de motor y un accidente. Ha sido duro de asimilar, sobre todo por la forma en que fueron pasando todos los acontecimientos.

"Empezamos bien, con un buen plan de carrera", ha empezado diciendo. "Quería estar entre los diez primeros en el prólogo y lo hice, quería salir delante en la etapa 1 y lo hicimos detrás de Carlos, sabiendo que los de detrás nos pillarían y perderíamos tiempo para afrontar la 48 Horas. En la doble etapa, empezamos por la mañana con que los GPS no funcionaban, tenía que salir el 18º y me pusieron el 22º. Ya dentro del polvo, supimos aguantar; luego no funcionaban los ‘jacks’ al cambiar ruedas, no cambié… pero, aun así, en los 300 kilómetros de dunas atacamos de verdad, nos pusimos terceros de la especial y líderes de la carrera", ha señalado.

De hecho, cree que pudieron mantener la calma, a pesar de todos los problemas que se fueron acumulando poco a poco, a medida que iban pasando los kilómetros. El problema llegó en las 48 Horas y, a partir de ahí, el motor dijo basta.

¿Un problema de fiabilidad por ser un motor nuevo? Nani tiene bastante claro que no, sobre todo si se compara con sus otros compañeros de Ford, que no han tenido ningún problema similar.

"El motorsport es duro. Los motores son iguales y una pieza que se rompe, rompe otra pieza. No hay culpables. Son las carreras. Allí nos quedamos, tirados cinco horas, nos vino a buscar el camión de asistencia. Reparamos y salimos al día siguiente ya con otra misión: estar detrás de Mitch y Mattias, y ayudarles", ha señalado.

¿TIENEN LOS OTROS FORD OPCIONES A VICTORIA?

Así es como lo afronta ahora, de una forma distinta, desde otro prisma, y con la posición clara de ayudar a Ekström y Guthrie. El Dakar iba a ser duro y eso no es una sorpresa, aunque quizás la posición de las 48 Horas no ha sido la ideal.

"Sabíamos que sería un Dakar duro. La 48 Horas al segundo día, para mí, es demasiado porque ha dejado a mucha gente fuera al inicio. Se lo dije a Castera. Pero también sabía que podía ser una carrera muy buena para mí, porque me gusta este tipo de rally", ha confesado.

"Es una lástima, lo hablaba con Carlos: era muy buen año. Pero lo que tiene solución no es un problema. Sigo aquí, vamos a ayudar a los chavales, darles confianza con un coche rápido detrás (de asistencia). Estoy aquí para ellos. Y sigo probando cosas en carrera", ha dejado reflejado en su intervención.

A pesar de la persistencia de los Toyota y Nasser Al-Attiyah, el último Dacia con opciones, lo cierto es que Nani Roma no da por perdido el Dakar para Ford. Cree que Mattias Ekström, que va tercero en la general, por detrás de Lategan y Al Rajhi, todavía tiene grandes opciones de pelear.

"Creo que sí, porque los pilotos que tiene delante no son muy constantes. Nasser todavía tiene mucho que decir, pero tiene que arriesgar para recuperar 35 minutos y su Dacia también es muy nuevo. Lategan no es un superpiloto en las dunas y quedan dos días muy duros. Yazeed es súper rápido, pero no es constante. Creo que si Mattias sigue a este ritmo van a pasar más cosas. Sería bonito. Pero en nada cambia todo", ha hecho un análisis exhaustivo de la situación.