Max Verstappen ha servido hoy el primero de los dos días de servicios públicos que le impusieron después de su encontronazo con Esteban Ocon en el pasado GP de Brasil de Fórmula 1.
Max Verstappen trabajará como comisario de la FIA este fin de semana en el ePrix de Marrakesh de Fórmula E, parte del 'castigo' de la Federación en calidad de "servicios públicos" que el holandés 'se ganó' por el altercado con Esteban Ocon en el GP de Brasil.
Sebastian Vettel, a diferencia de otros pilotos, considera que el uso de videojuegos no ayuda a mejorar las habilidades al volante. Cree que lo virtual no puede trasladarse a lo real y considera, además, mirando más todavía hacia el futuro, que los coches eléctricos no solucionarán el problema de la contaminación.
Red Bull se tuvo que conformar con ocupar la tercera línea de la parrilla. Daniel Ricciardo saldrá quinto, después de haber pasado a la Q3 con los ultrablandos y Max Verstappen arrancará en sexto lugar.
El fundador del equipo de Fórmula 3 europea y de F4 Van Amersfoort, Frits, ha trabajado tanto con Max Verstappen como con Mick Schumacher y aplaude lo meticuloso que es el alemán en comparación con el holandés.
Sebastian Vettel coincide en que quizás sus títulos de Fórmula 1 llegaron demasiado pronto, no obstante, el alemán siempre mantiene nuevos retos en su mente y el próximo es ganar un nuevo campeonato con Ferrari. Sobre el futuro, no descarta participar en otras carreras como las 24 horas de Le Mans.
Jos Verstappen ha dejado de ser uno de los cazatalentos de Red Bull. El expiloto de Fórmula 1 trabajaba para Helmut Marko desde el año pasado, en busca de las nuevas generaciones para el equipo de las bebidas energéticas, pero su hijo ha confirmado recientemente que ha dejado ese puesto para dedicarse a otros menesteres.
Varios de los pilotos que componen ahora mismo la parrilla de Fórmula 1 han experimentado qué se siente al competir en otras categorías. Hablamos de Kimi Räikkönen, Fernando Alonso, Nico Hülkenberg, Stoffel Vandoorne y Brendon Hartley, entre otros, así que preguntarle a un joven piloto si está interesado en correr en una prueba de la fama de las 24 horas de Le Mans es lógico. Max Verstappen responde afirmativamente, aunque con una condición.
Uno nació el 30 de septiembre de 1997 en Hasselt, Bélgica. El otro el 16 de octubre de ese mismo año, en Montecarlo. Les separan poco más de dos semanas, un centímetro de altura y dos kilogramos de peso. Más parecidos no podrían ser, en otras palabras.
Valentino Rossi buscará su sexta victoria en el Monza Rally Show en 2017, demostrando su velocidad a cuatro redes y el por qué Ferrari le hizo un test en F1 en 2008 y se ha rumoreado tantas veces que el astro italiano del motociclismo pudiese competir en el Gran Circo.
La sanción a Max Verstappen en el GP de EE.UU. no ha dejado indiferente a nadie, y por ello el número de personajes que ha criticado la actuación de los comisarios aumenta cada vez más. Esta vez, el comisario de IndyCar, Arie Luyendyk, ha alzado la voz para dar alternativas que acabarían con este tipo de polémicas.
Restan pocos días para el arranque del Gran Premio de Japón, mientras tanto, los pilotos se van empapando en el ambiente nipón. La mayoría ya está en el país, para conseguir que el jet-lag les afecte lo menos posible.
La mano de Liberty Media cada vez se nota más y ante un evento como el Gran Premio de Italia, no podía ser menos. A su llegada a este país, la Fórmula 1 organizó en Milán un desfile de pilotos, una cita de aires parecidos a la que se organizó en Londres en el mes de julio.
