Renault Sport pasa a estar bajo el paraguas de Alpine
Renault Sport Cars ha muerto, larga vida a Alpine Cars. El Grupo ha anunciado que su división deportiva ha cambiado de nombre para alinearse con la nueva estrategia comercial de su presidente, Luca de Meo.
De Meo ya había dejado claro que Alpine canalizará todos los esfuerzos deportivos del Grupo Renault, como prueba el hecho de que ahora el equipo de Fórmula 1 lleve su nombre o que la compañía haya anunciado su retorno a las 24 Horas de Le Mans.
Dado que este papel entraba en contradicción directa con el de Renault Sport, que hasta 2020 asumía esta función, de ahora en adelante RS pasará a llamarse Alpine Cars para remarcar que pertenece a la misma unidad de negocio.
Ahora bien: es importante notar que la Alpine 'tradicional' se llama Societé des Automobiles Alpine y opera desde Dieppe, a 200 kilómetros de la fábrica de Les Ulis, donde están los ingenieros de la nueva Alpine Cars.
Este cambio de identidad refleja el acercamiento entre las dos sedes, que de ahora en adelante trabajarán coordinadas.
De hecho, el escueto comunicado oficial anticipa que "la fábrica de Les Ulis ya está implicada en el desarrollo de la futura gama completamente eléctrica de Alpine".
"Como parte de la reorganización del Grupo Renault por marcas, es esencial que las entidades que conforman la unidad de negocio lleven el nombre de Alpine y abracen los valores y ambiciones de la marca", ha declarado Laurent Rossi, director ejecutivo de Alpine.
"Alpine quiere ser una marca deportiva premium a la vanguardia de la innovación y la tecnología. El saber hacer de Alpine Cars y su experiencia con vehículos deportivos son un as en la manga para conseguir nuestros objetivos".
Aún está por ver qué repercusiones tendrá esta transformación en coches como el Renault Clio RS o el Renault Mégane RS, que en la actualidad lucen las siglas de Renault Sport para reflejar su condición de vehículos de alto rendimiento.
