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Las Finali Mondiali Ferrari arrancan en Monza

José Miguel Vinuesa
02/11/2018 16:12

Este fin de semana, en el circuito de Monza, se disputa uno de los eventos automovilísticos del año: las Finali Mondiali Ferrari, en las que se celebra el mito de la marca, pero también se resuelven algunos de los campeonatos de la copa monomarca de Maranello, la Ferrari Challenge.

Las Finali Mondiali acogerán, como de costumbre, no sólo competiciones, sino también exhibiciones. Por ejemplo, la de los F1 de la sección Corse Clienti –con monoplazas de distintos años en pista-, los programas XX –fundamentalmente el FXXK Evo, pero también el 599FX y el mítico FXX-, y junto a ellos, acción en pista con clásicos de la marca, clientes que toman la pista con sus modelos particulares, exhibiciones en el paddock, la muestra de los modelos en catálogo actualmente y como colofón, además de las carreras de la Ferrari Challenge, la exhibición de los equipos de F1, resistencia y GT en la pista.

La historia de la Ferrari Challenge, se remonta a 1993, hace 25 años –y 26 temporadas-, cuando el entonces presidente Luca Cordero Montezemolo decidió crear una competición monomarca pensada para los afortunados clientes que quisiesen experimentar la adrenalina de ser piloto. Y desde su creación, Pirelli ha sido el suministrador oficial del certamen, que tiene precisamente en su Trofeo Pirelli la cúspide de las cuatro secciones en que se divide el campeonato. Para la marca turinesa, todo un campo de investigación en el que estudiar nuevos conceptos en condiciones extremas, pero basados en modelos de calle dotados de las mismas características y comportamiento dinámico.

El primer protagonista del campeonato fue el Ferrari 348 Challenge. Derivaba de los 348 TB y TS de 1989, y montaba la mecánica V8 de 3.5 litros y 320 caballos. Apenas tenía modificaciones con el coche de calle, pero una de ellas eran los neumáticos lisos de Pirelli de 17 pulgadas con diferentes medidas en los dos ejes -245/620-17 y 265/640-17, respectivamente-. Las gomas conservaban una importante vinculación con sus homólogas de calle, no en vano Pirelli utilizó los mismos moldes que en el P Zero equipado en los 348 TB y TS, aunque con construcción y compuesto específicos.

El 348 disputó sus últimas carreras en 1996 junto al nuevo 355 Challenge,  cuyo motor V8 era  capaz de entregar 380 caballos. En consecuencia, Pirelli incorporaba por primera vez gomas de 18 pulgadas. Tras cuatro años, en el 2000 llegaba el 360 Challenge, basado en el 360 Modena. La nueva unidad igualaba en potencia al modelo del que derivaba, 400 caballos, pero con menos peso. Pese a ello, las Pirelli nacidas para el 355 seguían resistiendo sin demasiados apuros las nuevas exigencias del coche y sus pilotos, lo que significó que tan sólo se precisó adaptar medidas y compuestos.

El 430 Challenge marcó un antes y un después en la historia del campeonato. Aunque con los mismos 490 caballos del modelo de calle, su chasis contaba con el aprendizaje de Ferrari en la Fórmula 1. Por ejemplo, frenos carbono-cerámicos, lo que exigió importantes modificaciones en el diseño de los neumáticos, y así llegaron cubiertas de 19 pulgadas, tanto slick como de agua. En 2010, el aclamado Ferrari 458 Italia se convirtió en el modelo de base para la Challenge, llevando a la pista los 570 caballos de su homólogo de producción, pero con 100 kg menos. Pirelli adaptó sus dimensiones y compuesto, manteniendo el mismo diámetro de llanta.

Finalmente, en 2016 llegó un modelo que ya podría considerarse un verdadero coche de competición, y que tuvimos la oportunidad de conocer en su debut en el año 2017 con motivo de la Ferrari Challenge celebrada ese año en el trazado de Cheste. El motor turboalimentado llegó con el 488 Challenge, convirtiéndose en la primera mecánica de este tipo en la historia del campeonato, y sus espectaculares 670 caballos. Pirelli tuvo que desarrollar un nuevo neumático con diferentes dimensiones para adaptarse a este plus de rendimiento del coche.

Theo Mayer, director del programa Pirelli en la Ferrari Challenge, comenta: “Este campeonato significa una excelente oportunidad de trabajo junto a Ferrari. Nuestro trabajo de desarrollo de neumáticos discurre siempre en paralelo al diseño del coche, comenzando un año antes del lanzamiento oficial de cada nuevo modelo, a fin de adaptar específicamente cada cubierta a los requerimientos del coche y sus futuros pilotos. El objetivo es siempre maximizar las prestaciones, echando mano de las últimas innovaciones técnicas de Pirelli en el mundo de la competición. Con ello se consigue desarrollar unas cubiertas mejores para cualquier condición. En el albor de nuestro 26º año de colaboración, nuestro nuevo objetivo es alcanzar, como mínimo, el medio siglo juntos”.

A buen seguro que tanto Ferrari como Pirelli seguirán unidos en este campeonato, cuya celebración no es sino una verdadera fiesta del automovilismo a través de la marca más legendaria de todas. En 1993 parecía una locura una copa monomarca de Ferrari. Hoy es un campo de estudio, evolución y emoción que nos parece indispensable.