Los coches eléctricos y autónomos reducirán los puestos de trabajo en la industria del automóvil
El negocio automovilístico va a cambiar en la Unión Europea durante los próximos años por el impacto provocado tanto por el coche eléctrico como por el vehículo autónomo. Todo indica a que se producirá una reducción de las plantillas de los diferentes fabricantes.
Esta conclusión la saca Carlos Faubel, el portavoz de UGT en la planta que Ford tiene en Almussafes, Valencia, tras asistir a una reunión en Detroit con representates sindicales de casi todas las fábricas que la marca del óvalo tiene. En ella ha participado el máximo ejecutivo de la misma, Jim Hackett.
Ha sido el propio Faubel el que ha anticipado que Ford va a cambiar durante los próximos meses, especialmente en suelo europeo. "Ford va a cambiar, y Ford Europa va a cambiar". De aquí a final de año la marca americana comunicará las decisiones tomadas para adecuarse a la nueva situación en nuestro continente.
Los grandes causantes de esta serie de cambios que se prevén son los nuevos vehículos autónomos que vienen, así como el paso de los motores de combustión a los eléctricos. Todo ello tendrá un impacto severo en las plantas de producción, lo que se traducirá en una reducción del número de puestos de trabajo necesarios.
En el caso de Ford, este mismo jueves se va a celebrar una reunión de la que se supone que saldrán las primeras decisiones a aplicar durante los años 2019 y 2020. En todo caso "se esperan tiempos complicados", según Faubel.
Ford, además de por el cambio tecnológico que se produce en estos tiempos, se ve afectada por la inestabilidad del brexit. De esta forma las diferentes marcas de coches, Ford inclusive, se enfrentan a un reto mayúsculo del que todavía no se pueden calcular sus consecuencias finales.
