Carrera memorable de Palou en St. Petersburg; Dixon es campeón

Alex Palou ha protagonizado una más que sólida exhibición de conducción eficiente y ha sacado partido de las banderas amarillas para recuperarse de un problema tras su primera parada que lo ha relegado al fondo de la clasificación. Ha pasado de vigesimosegundo a líder y ha estado a una bandera amarilla larga de llegar a la meta. Al final ha tenido que parar, pero ha terminado decimotercero.

St. Petersburg era el escenario de la última carrera de una temporada marcada por el COVID-19, que obligó a reformular un calendario que originalmente tenía que empezar en este mismo recinto. Las complicaciones de la pandemia obligaron a aplazar la fecha original del mes de marzo, pero ahora regresaba para albergar la lucha por el título entre un Scott Dixon que tenía suficiente con ser noveno –desde la undécima posición de la parrilla– y un Josef Newgarden obligado a la remontada –desde la octava–.

Alex Palou partía decimosexto después de una sesión de clasificación complicada. Desde antes de llegar al circuito ya sabía que no era el trazado ideal para su monoplaza por la falta de experiencia en pistas urbanas y la limitación en los entrenamientos. Aun así, era importante terminar el año con buenas sensaciones para acabar de dar el último empuje a las negociaciones por la renovación de cara a 2021, que ya estaban en marcha antes de este fin de semana.

Salida. Will Power controló a la perfección y llegó a la primera curva sin que nadie le hiciera sombra. Alexander Rossi y Colton Herta conservaron la segunda y la tercera posición. Josef Newgarden tuvo un pequeño toque, pero salvó el octavo puesto, con Scott Dixon también en su undécimo puesto original.

Alex Palou partía decimosexto, pero cayó a la decimonovena posición tras la salida. Las vueltas de formación fueron especialmente delicadas para el piloto del Team Goh, que tuvo un problema puntual en su caja de cambios. Por fortuna, lo pudo solventar a tiempo para la bandera vede.

En la vuelta 5, Will Power perdió el liderato. Entró pasado en la curva 10 y perdió inercia ante Alexander Rossi, que tomó el timón de la prueba. No sólo eso, sino que a partir de entonces su coche se volvió inestable y también cayó por detrás de Colton Herta y James Hinchcliffe.

El orden permanecía estable cuando se aproximaba la primera parada. Rossi tenía 1,4 segundos sobre Herta en la vuelta 15, 4,2 sobre Hinchcliffe y Power a 9,5 con aparentes problemas en la caja de cambio. Newgarden y Dixon seguían octavo y undécimo respectivamente, y Palou decimoséptimo con los primeros pit-stops de sus rivales.

Rossi tan sólo tenía 0,9 segundos sobre Herta al llegar a la 25, pero ampliaba su renta sobre Hinchcliffe –7,7– y Power –14,0– para convertir la carrera en una cosa de dos. Newgarden era séptimo y Dixon noveno con las paradas ajenas. Palou aguantaba decimoquinto.

Newgarden paró en la vuelta 29, lo que provocó que Dixon entrara en la 30 para marcar de cerca a su rival. Ambos cambios de ruedas fueron limpios y los dos mantuvieron sus posiciones en pista, con un coche entre ambos. Alex Palou hizo su pit-stop en la 29.

La carrera de Palou se complicó en la 32. El piloto entró por la radio para preguntar si tenía algún pinchazo, porque notaba algo extraño en su coche. Su ingeniero le respondió que no, que las presiones eran correctas, pero Alex insistía: "Hay algo que va mal en la rueda trasera derecha. Miradlo".

En la vuelta 33, entró Colton Herta para tirarle el undercut a Alexander Rossi, pero éste paró en el siguiente giro y conservó el liderato. También en la 34, Newgarden y Power tuvieron un pequeño toque entre compañeros de equipo. El primero pasó y se puso sexto, con Dixon undécimo.

En la radio de Palou, la conversación entre el piloto y su ingeniero continuaba. Su equipo le pedía más detalles. Alex explicaba que el coche giraba de más cuando viraba a la izquierda. "Es como si hubiera tocado el muro, pero no lo he hecho", decía.

En la 36, los comisarios decretaron una bandera amarilla después de que Will Power tuviera un toque y aparcara en la escapatoria. El equipo de Palou aprovechó la interrupción para hacer un segundo pit-stop e intentar solucionar los problemas de su monoplaza. En aquel momento era vigésimo.

Alex hizo su segundo pit-stop en la vuelta 39. El equipo le cambió los neumáticos. "No hemos visto daños en el coche ni nada que sugiera un toque con el muro", le dijo su ingeniero al poco de salir del Pit-Lane. Alex le preguntó si las gomas que le habían quitado tenían buen aspecto y su equipo le respondió que no se apreciaba nada extraño a simple vista.

La carrera se relanzó en la 41 –Newgarden pasó a VeeKay para ponerse cuarto, con Dixon noveno–, pero la bandera amarilla volvió a ondear tras apenas dos curvas por un accidente de Santino Ferrucci. Rossi, Herta y Hinchcliffe copaban el podio. Palou era vigesimosegundo.

Fruto de esta nueva interrupción, Alex y su ingeniero retomaron la conversación sobre los problemas de balance de su monoplaza. En base a las respuestas del piloto, su equipo dedujo que podía tratarse de un problema en un muelle de la suspensión. "No podemos hacer nada al respecto", le dijeron.

La bandera amarilla se prolongó más de lo debido porque Conor Daly golpeó el muro mientras hacía zig-zag para calentar los neumáticos.

La carrera se relanzó en la vuelta 47… pero acto seguido se decretó la tercera bandera amarilla porque Rinus VeeKay y Scott McLaughlin se tocaron en la primera curva. A todo esto, Dixon era octavo y Palou decimoctavo.

El Gran Premio se relanzó en la 53. No hubo cambios en las primeras posiciones, pero Dixon adelantó a dos coches para ponerse sexto. Palou también superó a dos rivales para auparse a la decimosexta posición.

Con menos vueltas en su haber que sus rivales, Alex activó el modo 'ahorro de combustible' para tratar de alargar al máximo su stint y beneficiarse de una nueva bandera amarilla.

En la 63, Herta cometió un error cuando iba segundo. Bloqueó en la curva 4 y visitó la escapatoria. Pudo seguir, pero cayó a la cuarta posición. Eso elevó a Josef Newgarden al tercer puesto, aunque Dixon era sexto y eso daba el título al neozelandés.

Josef Newgarden adelantó su último pit-stop en la vuelta 66, en una maniobra arriesgada para beneficiarse de una posible amarilla. El líder Rossi entró en la 67 para protegerse; Dixon, también.

Palou aprovechó esta oleada de pit-stops para poner un mapa motor más agresivo y sacar partido de los neumáticos fríos de sus rivales.

En la vuelta 70, la campanada: el líder virtual, Alexander Rossi, hizo un trompo en la salida de la curva 3 y golpeó el muro interior. Con el motor calado, abandonó y provocó una nueva bandera amarilla.

"Alex, haz todo lo que puedas para ahorrar gasolina. Nos quedaremos en pista". Ése fue el mensaje que recibió Palou al confirmarse la nueva interrupción, que llegaba cuando era séptimo.

Cinco coches entraron en el Pit-Lane, de modo que Alex se aupó a la tercera posición. "Pero tendremos que volver a parar, ¿no?", preguntó en un momento dado. Le respondieron que sí, pero que intentarían aguantar fuera el máximo para repostar poco combustible. "Si queréis que ahorre gasolina puedo aguantar, pero si tengo que apretar me quedaré sin gomas", dijo.

La carrera se relanzó en la vuelta 74. Herta defendió el liderato y Palou aguantó a Newgarden, que era cuarto. Antes del siguiente paso por meta, un nuevo accidente provocó otra bandera amarilla. Inesperadamente, Hinchcliffe cometió un trompo de principante en la última curva y dañó el alerón.

El fallo de Hinchcliffe dejó a Palou en segunda posición. "Ahorra todo lo que puedas", le dijo su ingeniero. Y acto seguido, para acabar de complicar las cosas, se abrieron los cielos y comenzó a llover en una sección de la pista. "Puede ir a peor", le dijeron.

La resalida fue en la vuelta 79. Palou se permitió la heroicidad de arrebatarle el liderato a Herta en la primera curva, pero tuvo un latigazo en la salida y Newgarden le birló la posición. En la siguiente frenada perdió posición con Herta, Dixon y O’Ward por sus neumáticos fríos.

En ese mismo giro, Oliver Askew tuvo un accidente y provocó una nueva bandera amarilla. A Alex le pidieron que volviera a ahorrar combustible, "porque éstas son nuestras opciones".

Respondió que "si ahorro todo el tiempo, mis neumáticos están congelados". Pero se interesó por sus opciones de llegar a meta sin un último pit-stop. "Aún vamos un poco cortos, pero estás haciendo justo lo que tienes que hacer. Sigue así", le respondieron.

Tanto tuvo que rodar el coche de seguridad que, en la vuelta 83, se quedó sin combustible.

En la 84, la resalida. Newgarden aguantó el liderato, aunque O'Ward irrumpió en escena como una exhalación, pasando primero a Dixon y luego a Herta para ponerse segundo. Palou perdió posición con Bourdais y se puso sexto.

En la 85, Herta cometió un nuevo fallo en la frenada de la curva 4. Eso dejó a Dixon en tercera posición y devolvió a Palou a la quinta. Colton cayó a la decimotercera.

El periodo de bandera verde que siguió truncó las opciones de Palou, que tuvo que hacer una última parada en la vuelta 94 cuando iba quinto. Puso sólo gasolina y siguió adelante. Se reincorporó decimotercero.

Por delante, la clasificación permaneció estable. Josef Newgarden ganó la carrera por delante de Patricio O’Ward, pero Scott Dixon cruzó la línea de meta en tercera posición, suficiente para proclamarse campeón de la IndyCar

Por delante, la clasificación estaba estable. Newgarden tenía tres segundos sobre O’Ward al llegar a la vuelta 95, aunque la tercera posición de Scott Dixon invalidaba sus opciones al título por sexta vez en su trayectoria deportiva.

RESULTADOS CARRERA GP ST PETERSBURG 2020