BYD, el gigante chino de vehículos eléctricos y baterías, se ha convertido en el mayor productor de mascarillas
La fábrica de automóviles china BYD ha tenido una reacción espectacular ante la pandemia provocada por el COVID-19: se ha puesto a producir mascarillas y líquido desinfectante a un ritmo espectacular. En sólo un par de meses se ha convertido en el mayor productor de mascarillas del mundo.
El constructor chino está fabricando nada menos que ¡5.000.000! de mascarillas diarias y 300.000 botellitas de líquido desinfectante. Puede parecer muchísimo –lo es, de hecho– pero si tenemos en cuenta la población actual de China es casi una aguja en un pajar.
Wang Chuanfu, el fundador de BYD, tomó la decisión en enero, siguiendo posiblemente las directrices gubernamentales. Puso a trabajar a 3.000 personas, muchos de ellos ingenieros, para diseñar y construir la línea de producción aprovechando al máximo elementos que ya fabrica o podía fabricar.
De hecho, BYD se inició como fabricante de baterías y amplió el negocio a la producción de automóviles cuando el Gobierno de China decidió apostar decididamente por este tipo de propulsión con el fin de ‘paliar’ los graves problemas de calidad del aire en sus grandes ciudades. Actualmente también participa en una sociedad conjunta con el grupo Daimler, Denza, para fabricar alguno de sus modelos destinados al mercado chino.
A algunos les sonará esta marca, especializada en vehículos eléctricos. Al menos en Barcelona tenían un punto de venta y se vieron algunas unidades usadas como taxi. También puede ser que les suene porque están vendiendo a varios países sus autobuses eléctricos.
La razón de dar salto a la fabricación de estos imprescindibles elementos protectores frente al coronavirus fue para proteger a sus empleados –y de paso a su productividad– y también a los habitantes de la provincia de Hubei, donde está ubicada; el grueso de su producción va destinada a establecimientos sanitarios y a las empresas de transporte.
Otras grandes empresas chinas han seguido el mismo camino, demostrando la gran capacidad de reacción una vez se toma una decisión –lo que algunas veces tarda más tiempo– que nos sorprende, como fue el caso del famoso hospital de 1000 camas en unos días. Entre estas empresas están Guangzhou Automobile Group, la petrolera Sinopec y Foxconn, que produce buena parte de los iPhone de Apple.
