¿Es seguro Spa? Dudas a tres semanas del GP de Bélgica

Los dos últimos Grandes Premios, Silverstone y Hungría, se han saldado con accidentes por toques entre participantes en la primera vuelta. Además, toques en cabeza de parrilla, con lo que las posibilidades de una carambola múltiple aumentan.

Michael Masi, director de carrera de la F1, estima que Spa es seguro y por ello tiene licencia de Grado 1, que es la necesaria para celebrar Grandes Premios de F1. "Se han hecho algunos trabajos en Spa en varias áreas. Hay algunos cambios y mejoras que se hacen año tras año, pero tal como está es seguro desde el punto de vista de la FIA".

Es cierto que las dinámicas de Silverstone y Hungaroring difieren. En el primer caso, fue en la curva más rápida del circuito cuando los dos protagonistas, Lewis Hamilton y Max Verstappen, habían tomado ya una ligera ventaja, lo que evitó que el choque fuera múltiple. El segundo, en la primera frenada, antes del ángulo de final de recta, con el pelotón todavía compacto, que implicó a ocho coches… en dos partes, pero muy probablemente el de Lance Stroll y Charles Leclerc no se hubiera dado de no haberse producido el primero y sembrado el pánico en el pelotón.

La preocupación en Spa viene dada tras el grave accidente en las 24 Horas de Spa del pasado 31 de julio en Raidillon, que eliminó a cuatro coches y en el que el Lamborghini de Jack Aitken quedó destruido y el piloto reserva de Williams resultó con una fractura de clavícula y también de una vertebra, aunque sin problemas mayores.

Todo ello ha hecho despertar el recuerdo del accidente de Fórmula 2 hace ya dos años entre Juan Manuel Correa y Anthoine Hubert, del que el primero todavía se está reponiendo –aunque ha vuelto a la competición este año– de sus graves lesiones en las piernas, mientras el prometedor francés falleció.

La preocupación es lógica porque Spa tiene dos puntos iniciales concretos factibles de que se repita la historia de Silverstone o la de Hungría. El primero, el ángulo de La Source, al final de la corta recta de salida donde en los últimos años la fenomenal escapatoria asfaltada ha salvado de más de un incidente, pero donde se produjo aquel causado por Romain Grosjean y su entonces Lotus, que pasó por encima de algunos coches, en concreto sobre el de Fernando Alonso, y milagrosamente se saldó sin daños personales.

Y el segundo en la zona de Eau Rouge-Raidillon, que se afronta a toda velocidad, con los coches en su mayoría juntos. Fue allí donde se produjo el accidente de Hubert, aunque no fue en la primera vuelta sino en la segunda, y no fue un toque por detrás sino una pérdida de control que hizo que Correa le embistiera con un ángulo de 90º, algo que no pudo esquivar.

Incluso algo similar puede darse en Pouhon, que dicen es en la actualidad la curva más delicada de Spa y en la chicane de Les Combes, a la que se llega a casi 350 kilómetros/hora y si hay un error de apreciación de la distancia de frenada es fácil que ocurra un 'strike', aunque preocupa menos porque la curva en sí es de relativa baja velocidad.

Este accidente, el de Correa, puso de manifiesto que las escapatorias asfaltadas si bien acrecientan la seguridad en un accidente en solitario, ya que permiten al piloto mantener un cierto control sobre el coche –cosa que no sucedería en grava–, tienen en contrapartida el peligro de que los pilotos no ralentizan excesivamente si se salen y sólo piensan en volver a pista con rapidez.

Es más, mientras los circuitos se han adecuado para minimizar las causas de un impacto contra las barreras, poco puede hacerse frente al choque de dos coches. Esto también sucede en las motos, donde buena parte de los últimos accidentes mortales se han producido por atropello tras una caída; los que vienen detrás no pueden esquivarlo.

Correa, antes de esta prueba, ha emitido un comunicado en el que dice que, desde su accidente, ha mantenido serias conversaciones con la FIA para estudiar lo que se puede hacer. Lo cierto a velocidades tan elevadas como las de Eau Rouge o Raidillon hay poco margen para la reacción.

"Durante los últimos días he recibido numerosas solicitudes de diferentes medios que me pedían comentarios sobre el accidente de Jack Aitken en las 24 Horas de Spa. Primero y lo más importante, quiero decir que estoy extremadamente contento de que tanto Jack como los restantes pilotos involucrados en el accidente se estén recuperando de sus lesiones".

"El accidente ocurrió casi dos años después de mi accidente en Radillon-Eau Rouge en este mismo circuito, donde sufrí lesiones importantes, de las cuales estoy todavía recuperándome, y la comunidad del automovilismo perdió trágicamente al piloto francés Anthoine Hubert. Las imágenes del accidente que he podido ver son particularmente inquietantes", se puede leer en el escrito de Correa.

"Desde mi accidente he expresado a la FIA y los organizadores varias preocupaciones por la seguridad de la pista y el piloto. Me he ofrecido a compaetir mi propia experiencia. He estado buscando respuestas a lo sucedido, el porqué y qué medidas han tomado FIA y organizadores para evitar que más pilotos sufran lesiones en circunstancias similares".

Correa expresó que estas conversaciones siguen y tiene la confianza "de que se alcanzarán conclusiones constructivas. En las próximas semanas estaré en una mejor posición para comentar al respecto". Sin duda, Correa quiere volver a pasar por ese lugar para comprobar si lo que tiene en mente es factible.

A 280 kilómetros/hora, en una décima de segundo –un tiempo de reacción más o menos razonable, aunque los pilotos seguramente emplean menos–, un monoplaza recorre casi ocho metros, la longitud de dos coches, una distancia que es posible que sea superior a la que mantienen muchas veces dos coches en las primeras curvas.

Y, sobre todo, depende mucho de la visión que tenga el piloto. Si se encuentra con que se cruza el coche de delante, tiene una visión directa de lo que sucede, una idea de lo que le va a pasar a ese coche y puede reaccionar en consecuencia. Pero si esta tapado por otro coche, cuando ve el incidente quizás es ya muy tarde.

Spa ha anunciado recientemente una inversión de 80 millones de euros en algunas modificaciones en la pista, sobre todo en seguridad, y el retorno de la grava a algunas escapatorias y la ampliación de las mismas, especialmente en Raidillon. Algunos de estos cambios se han efectuando para propiciar el retorno del Mundial de Motociclismo a esta pista.

Pero Callum Ilott, expiloto de F2, reserva de Alfa Romeo y que disputó estas últimas 24 Horas de Spa con Ferrari, se pregunta si son suficientes. Para el piloto "es necesario cambiar esta curva de Raidillon. Me sorprende que todavía no lo hayan hecho. Suficiente significa suficiente". Estas últimas tres palabras de Ilott indican claramente que no puede esperarse más tiempo para hacerlo.

¿Prescindir de una curva mítica o rectificarla? No es un problema grave. Eau Rouge ya se ha modificado y dulcificado en varias ocasiones y Silverstone ha variado por completo de diseño sin perder por ello su atractivo.

En cualquier caso, minimizar las consecuencias de un accidente por choque directo entre dos coches no es nada sencillo y la FIA lo intenta de dos formas: procurar que un coche que se sale no vuelva a la pista sin control y con el aumento de la protección pasiva de los coches.