Brasil, el Mundial F1 en juego... y otros que ya se decidieron

A mí me gustaría contaros, ahora que llegamos a Brasil, por qué surgió esta idea. Por aquel entonces –hablamos del año 2012– intentaba tocar la guitarra –bueno, y ahora también sigo en el empeño–. Esa es una de las canciones con las que practicaba y me tenía absolutamente enamorado. Pensamos hacer algo emotivo con Fernando, que nos pudiera ayudar a todos a subirnos al carro de una misión imposible: la de intentar ganar el Mundial de ese año con Ferrari a pesar de que Vettel lo tenía todo a su favor.

Queríamos apelar a la épica, al sentimiento… y queríamos hacer algo con una música que nos sirviera tanto si ganaba como si perdía, y Nothing else matters creo que reunía todas esas condiciones. 

Así que un día, haciendo la reunión de escaleta, les propuse a Julio Morales –subdirector– y Manu Casais –realizador– hacer un vídeo con un guitarrista e imágenes de Fernando de toda la temporada, la lucha, el suplicio, la rebelión de Fernando a la lógica… Les pareció bien la idea, luego lo mejoramos, Manu Casais hizo magia con el escenario y el montaje de vídeo y mi locución que escribí en un avión que le daba un poco más de ganas de aliarte. 

Salió mal, pero era lo lógico, Sin embargo, creo que fue uno de los mejores vídeos de entrada que hemos hecho. Me acuerdo con mucho cariño de esa canción y, sobre todo, cada vez que la escucho recuerdo lo que vivimos en este Gran Premio, lo que vivimos, lo que sufrimos, lo que disfrutamos y lo que se escapó.

Llegar ahora a Brasil y ver que no hay opción de nada, da un poco de pena. Pero confío en el futuro., en que algún día tenga "una buena espada" –que todavía no le han dado desde entonces– para poder seguir luchando por poner las cosas difíciles a los de arriba.

Y ahora lo que viene es la batalla final, de la que Alonso está fuera –obviamente–, Carlos Sainz también. Cada uno tienes sus pequeñas batallas, pero en lo que tenemos que centrarnos es en la lucha por el Mundial… y ahí está Nico Rosberg y Lewis Hamilton.

Si yo fuera Rosberg, no me apetecería mucho correr en Brasil. ¿Por qué? Simplemente porque es una carrera con una salida complicada, una primera curva donde suele haber problemas, con alta probabilidad de coche de seguridad, donde la meteorología suele ser en ocasiones adversa, pista difícil si hay lluvia, muchas banderas rojas en el pasada, posibilidad de graining… en fin, un lugar complicado.

No obstante, Rosberg tiene un comodín. Si cogemos las misas razones que os he dado y esa 'mochila' se la ponemos a Hamilton, nos damos cuenta de que el inglés tiene mucho más que perder que su compañero de equipo, aunque él no puede perder el título –al contrario que Rosberg–, y eso psicológicamente afecta bastante.

Hamilton tiene que ganar las dos carreras y buscar aliados, como la alianza de Red Bull, Ricciardo y Verstappen, al menos en Brasil. Pero si le recorta puntos en Interlagos, la presión va a ser muy fuerte para el piloto alemán.

¿Y por qué no Ferrari como juez entre los dos de Mercedes? No creo que podamos confiar mucho en un equipo con tanta tensión, con un equipo que busca culpables entre sus miembros. Ferrari acumula años sin ganar y es una escudería como el Real Madrid o el Barça. No pueden seguir adelante sin ganar títulos que los avalen… pero las cosas no las están haciendo bien en Maranello.

En fin que nos vamos a divertir. Me quedo con el recuerdo de esta canción y espero que el año que viene, Fernando Alonso tenga "una buena espada".